En cuando al conflicto Rivera-Pantoja, Zaldívar asegura que no ha disfrutado viéndolo a pesar de lo que se podría pensar por ver a la tonadillera en esa posición de mala de la película. Como madre y como hija, "tuve un sentimiento horroroso" y todo lo que se ha dicho y visto "me pareció más duro que sorprendente", ya que por parte de Isabel Pantoja a ella pocas cosas le sorprenden ya, aseguró también.
"Isabel Pantoja fue lo peor que me ha pasado en la vida"
Con el ralentí emocional del paso del tiempo, Mayte Zaldívar confesó que ha podido reflexionar mucho y darse cuenta de lo equivocada que estuvo cuando decía que la Pantoja le había robado el marido. "Ella nunca me robó a mi marido, porque él era mayor de edad y sabía con quién se iba, igual que ella también lo sabía", aunque lo que venía a continuación era todavía mucho más doloroso: "Ella me jodió y me robo mi vida y mi familia, lo diré antes y lo digo ahora", sentenció.
Jorge Javier Vázquez quiso remontarse muchos más años atrás y saber cómo fue el momento en el que Isabel Pantoja apareció por primera vez en la vida de la entrevistada. Zaldívar asegura que la primera que la vio fue tras una actuación en Marbella, que ella y su equipo habían ido a comer al restaurante que ella tenía en Puerto Banús. Un primer encuentro en el que la exmujer de Julián Muñoz ya salió perdiendo porque "no me pagaron aquella comida", aunque por aquel entonces no le dio mayor importancia porque "como era una artista". No fue entonces cuando la tonadillera puso los ojos en su marido, recuerda, ya que no era más que "era camarero" y la Pantoja "no se iba a fijar en un camarero". Tampoco Julián Muñoz mostró especial interés en ella como tantas veces confesó asegurando que "la primera vez que la vio no le gustó". "Lo dijo antes, durante y después", recalcó la entrevistada.
Posteriormente Isabel Pantoja ya pasó a formar parte del círculo más cercano de la familia, pero el trato entre ella y Mayte Zaldívar tampoco es que fuese mucho mejor entonces por mucho que lo pareciese públicamente. "Yo al principio la trataba normal, ella era un poco soberbia. Eso me parecía en la manera de actuar". También recuerda que le hablaba mucho de su familia, "de sus hijos, de su vida". Ahora, con el paso del tiempo, Zaldívar asegura que en la forma de tratarla la Pantoja siempre llevo ventaja porque, como amante de su marido, conocía muy bien su situación.
"Me dijo que la prensa estabais inventado todo"
La que fue mujer de Julián Muñoz recuerda también de aquellos años la llamada telefónica que recibió de Isabel Pantoja cuando los rumores de un supuesto affaire entre ella y el entonces Alcalde de Marbella llegaron a la prensa rosa. "Me dijo que la prensa erais lo peor, que estabais inventando todo". Por aquel entonces se la quiso creer. Pero hubo un momento en el que comenzó a ver las cosas con mucha más claridad. Todo comenzó durante una comida en Cantora precisamente en Día de los Enamorados de hace muchos, muchos años.
"Yo me tenía que haber ido con unos amigos a Italia, pero no fuimos porque él me puso una excusa", recuerda de aquellos días tan cruciales. "Él insistió en yo que me fuese, pero yo no quería ir de canasta. Me quedé y ¿cuál fue mi sorpresa? Llamo ella a primera hora de la tarde (...) y fuimos a Cantora a cenar". Allí había más gente, no era una velada íntima de los tres, y por aquel entonces ya todos sabía lo que ocurría menos ella. "Me sentí incómoda, había cosas que no me gustaron", recuerda: "Yo vi una risa tonta, un roneo y no me parecía normal porque estaba su mujer al lado". Para Mayte Zaldívar fue cuando Isabel Pantoja pasó el límite.
Por ello esa misma noche al llegar a casa se lo preguntó directamente a Julián Muñoz. "Yo a él le había perdonado ya una infidelidad, y le dije que no le iba pasar ni una más", y quiso saber si entre ellos había algo: "Esa noche hablé con mi marido y le dije que no me gustaba". Pero su por aquel entonces marido le dijo que físicamente la Pantoja no le gustaba nada y la comparó con otra conocida mujer que tampoco era precisamente de su agrado. Para su desgracia, "en él aquel momento lo creí".