Maite de 'Gran Hermano', sin duda, se ha convertido en la concursante más polémica de esta última edición del programa. Su paso por la casa fue breve, pero fuera del concurso está demostrando que si quiere, puede seguir siendo el centro de todas las atenciones. Así lo demostraba el pasado viernes cuando se tiraba un eructo en medio del plató de 'Sálvame Deluxe' y ante la sorpresa de todos los colaboradores.
La navarra insistió en su naturalidad y justificó todos sus actos por tener ese carácter tan libre de prejuicios. Acto después quiso demostrar sus palabras tirándose un eructo ante la estupefacción de todos los que se encontraban en plató. Las caras de asco y las risas se extendieron por todo el plató, pero Maite siguió como si nada.
Una mujer sin prejuicios
La exconcursante siempre se ha caracterizado por su forma de llamar la atención. Maite siempre ha dicho de ella misma que no es una persona convencional y que no sigue las reglas impuestas por la sociedad. Ella es así como es y a quien le guste, bien, y si no, pues también. Se considera una madre y una persona moderna y afirma que, a estas alturas de la vida, no tiene que quedar bien con nadie.