El huracán Maite sigue dando que hablar aún cuando la navarra todavía no lleva ni una semana fuera de la casa de 'Gran Hermano'. La primera expulsada de la casa de Guadalix de la Sierra se enfrentaba a la audiencia y a sus críticas nada más entrar al plató de televisión y es que, según palabras de Mercedes Milá, la concursante, como compañera, había sido como un cero a la izquierda. Las continuas broncas y la actitud que la navarra tenía dentro del programa llegó a desquiciar al resto de concursantes que no tardaron nada en nominarla con prácticamente la máxima puntuación.
Al inicio de sus declaraciones, Maite empieza asegurando que, si hubiera repesca, sin duda volvería al concurso. Sabe que su actitud dentro de la casa fue desmedida pero que aún así, si actuó de esa forma, fue porque quería que la audiencia tuviera lo que quería y porque ella es así: ''una mujer con ovarios''. También declaró que ve a su hija Sofía como una clara ganadora del programa.
''Me encantan los hombres''
Además de hablar sobre su actitud y lo imposible que le hicieron la vida el resto de concursantes, la navarra también tuvo palabras y alguna que otra acusación hacia Suso. Maite afirmó que el joven le parecía atractivo y que no le hubiera importado haberse acostado con él. Ante la incredulidad de la periodista, Maite confesó que Suso no sería el primer chico que compartiría con su hija Sofía. "Me encantan los hombres, me encanta el sexo'', proclamaba la navarra.