Tras una noche muy especial en la que Belén Esteban visitó la casa de Guadalix de la Sierra y en la que Lorena se convirtió la última expulsada de la edición, Jorge Javier Vázquez celebro que el concurso que presenta va llegando a su fin: "Ahora sí puedo decirlo: ¡Arranca la recta final de 'Gran Hermano Revolution'! ". Conectamos, porque los ocho necesitan su número de ganador". Los concursantes entraron a la sala de pruebas donde les esperaba el gran premio final y todos se asombraron al tenerlo ante sus ojos. "El maletín, chaval, el maletín ¡Qué barbaridad!", dijo Pilar en cuanto lo vio.
"Ahí tenéis el ansiado maletín del que no dejáis de hablar. Han pasado casi tres meses desde que en esa nave os comuniqué uno a uno que estabais dentro. Miriam y Hugo, vosotros comenzasteis juntos. ¡Quién lo diría...! Rubén y Christian, habéis llegado aquí sin haber estado nunca nominados, ¿estáis inquietos por saber lo que piensa el público ? Pues ha llegado el momento de averiguarlo. Desde esta noche la audiencia empezará a votar en positivo por su ganador. ¡Enhorabuena a los ocho, estáis en la recta final de 'Gran Hermano'! Os voy a pedir que abráis el maletín, dentro encontraréis ocho diamantes con el número de cada concursante ", dijo Vázquez antes de que los concursantes se pusieran la cinta con su teléfono en la cabeza.
"Antes de abrir los teléfonos vais a tener la oportunidad de convencer a la audiencia de que sois el último que merece salir ", añadió el de Badalona dando inicio a los alegatos de los concursantes. "Si gano yo es por suerte. Bueno yo hago lo mismo siempre pero yo estoy muy contenta. Yo quiero también, pero por suerte, si no suerte no gana. Ellos tambien son muy buenos", comenzó Yangyang antes de que Carlos argumentase que "creo que a pesar de mi boca, que es lo que más me ha podido traicionar aquí, estoy seguro... Entré el día 1 de una forma, estaba el día 30 de la misma forma y sigo igual. Me he guiado siempre por lo que me ha parecido bien y creo que es un concurso en que se premia a alguien real y que dice lo que piensa"
A continuación Christian Gabaldón dijo que "entre de la misma manera que me voy a ir. Si he gustado o no he gustado, no lo sé, pero he hecho las cosas de corazón y he hecho las cosas de manera justa conmigo mismo, no sé si habré sido justo con los demás", mientras que Miriam aseguró que "yo quiero ganar porque me mostré tal y como soy. Tuve defectos igual que cualquiera en su vida diaria... Quiero llegar hasta el final y claramente ganar. Por las buenas, sé que no hay nadie que me supere en eso". Por su parte, Hugo alegó que lo merece "por ser fiel a mi mismo, jugar siempre con la verdad y ser consecuente con lo que siempre digo. Ser de 'cuore', sin ser frío, ni calculador".
"Me lo he pasado bien, me he divertido mucho, he sido yo misma... He hecho algunos comentarios por los que he pedido disculpas. Era el sueño de mi vida y con estar aquí ya he ganado, aunque quisiera ganar", afirmó Pilar. "Me voy a dormir siempre con la conciencia muy limpia y eso significa que lo estoy haciendo bien conmigo mismo y, a quien le guste, que me vote por favor", dijo Rubén, mientras que Maico cerró los alegatos dieciendo que "me ha gustado mucho la experiencia. Era un reto bastante fuere para mí, pero me he divertido. Necesito bastante el maletín y si gusto, estoy, y sino, pues nada... La experiencia me ha servido".
Solo hay sitio para siete de los ocho concursantes
"Lo que no saben es que el menos votado no volverá a la casa esta noche. De momento, solo hay sitio para siete", dijo Jorge Javier Vázquez antes de abrir las líneas y dar inicio a un cronómetro para que la audiencia votara por su favorito. "Cuando la cuenta atrás llegue a cero, pararemos los teléfonos y solo siete volvéis a la casa ", desveló, más tarde, el presentador para sorpresa de los concursantes, que en ese mismo momento descubrieron que uno de ellos dejaría la casa para siempre esa misma noche. En plató, Maico fue el concursante más nombrado por los exconcursantes como firme candidato a quedarse en octava posición, seguido de Rubén o Carlos, que también fueron nombrados, aunque en menor medida.
Antes de desvelar el nombre del octavo finalista, el conductor del programa quiso aclarar que el orden en el que cada uno de los concursantes volvería a la casa, no se corresponde con el orden de favoritos de la audiencia, sino que sería totalmente aleatorio, aunque, en realidad, fueron dejando lo más interesante para el final. "La audiencia ha decidido que debe... volver a la casa: ¡Pilar! ", anunció Jorge Javier Vázquez en primer lugar. Con la misma fórmula, el presentador salvó de la terna a Christian Gabaldón, desatando los aplausos del público. "¿Has oído a la gente?", le remarcó Carlos a su amigo, que dejó la sala deseándole suerte a sus compañeros".
Después de que el presentador les recordase que "uno de vosotros vuelve hoy a su casa con lo puesto", Yangyang se unió a la aragonesa y al valenciano de vuelta a la casa, donde rompió a llorar de alegría por no tener que nominar más. A continuación, fue Miriam la que volvió a la casa, seguida de Carlos, por lo que el que fuera el 'Team Cazzo', el que fuese el grupo más inquebrantable de la casa, se quedó a solas en la sala después de que su amistad se rompiera por la traición de Rubén y Maico a Hugo, que ha pasado los últimos días bastante solo. "Hugo, Rubén y Maico. Es la última vez que estáis juntos los tres. ¿Algo que deciros? ", preguntó el presentador a los tres concursantes.
El 'Team Cazzo', 'unido' por última vez
Pregunta de la que Rubén quiso salir del paso deseándole suerte a sus compañeros y rivales, obviando la especial situación que comparten y con la que Hugo sí se mojo. "Guiándome por los últimos días que viví aquí dentro, seguramente sea la última vez que esté con ellos ", afirmó el uruguayo, muy serio, desatando una gran ovación por parte del público en plató, que seguramente desconcertó para mal al gallego. " Empezaron siendo amigos y está claro que ya no lo son. Uno de los tres deja de sufrir ahora mismo", dijo el presentador antes de afear que Maico le ofreciese caramelos a Rubén y a Hugo no.
"La audiencia ha decidido que debe volver a la casa... ¡Hugo!", desveló Vázquez para alivio del concursante, que lo celebró con rabia y se encaminó a la casa sin dirigirse a sus compañeros, quienes recibieron todo un mensaje de la audiencia con este veredicto. A su vuelta, todos celebraron con efusividad la llegada de Hugo, excepto Miriam, que le dio la enhorabuena bastante seria, consciente de en qué posición queda ella tras su gran discusión con el uruguayo, su fulminante nominación al mismo con seis puntos y su alianza con Rubén y Maico, que quedaron los últimos en la zona de peligro. "Solo queda una plaza, vuestros caminos se separan... Rubén, ¿quién se va?", preguntó el conductor del reality. "Pues yo creo que me voy yo", dijo el gallego, mientras que el italiano afirmó que "yo creo que, después de tantas salas de expulsiones que me he hecho, me voy yo".
"¿Por qué creéis que estáis aquí?", le preguntó JJ Vázquez y Rubén lo tenía claro. "Después de quedar aquí los tres y las preguntas que nos hiciste, yo creo que por el motivo del alejamiento de Hugo ", dijo el gallego de la traición a su amigo. "Uno de vosotros es el menos votado para ganar este 'Gran Hermano'. ¿Cómo sienta eso?", preguntó el catalán, a lo que el de Pontevedra, que nunca ha estado en la palestra, respondió que "yo ya lo dije... No entrar en una sala de expulsión y ser el primero en irse cuando se vota para ganar... Es una putada enorme, me jodería mucho la verdad".
"La audiencia ha decidido que debe abandonar la casa... ¡Maico!", desveló finalmente Jorge Javier Vázquez. Y, aunque respiró tranquilo, el gallego se quedó afectado por la salida de su amigo y, tal vez, ante el panorama que se le avecina en los próximos días en la casa, tras ser consciente de que el público está del lado de Hugo en la batalla que iniciaron la pasada semana. Sin embargo, su vuelta fue igualmente celebrada - especialmente por Miriam - ya que la mayoría prefería la salida del italiano. Pero lejos de alegrarse por su vuelta a la casa, Rubén se mostraba muy molesto por el gesto que tuvo, o más bien no tuvo, Hugo al dejar la nave de pruebas. "Tanta tontería, ¿los 44 años dónde los tiene? Es un puto juego al final...", le dijo el de Vigo a Miriam, refiriéndose a su examigo, al que también llamó "sinvergüenza" por haberle negado la mano cuando éste se la ofreció tras salvarse.