Y es que 'Supervivientes' tiene el don de transformar a todos los que pasan por allí. No solo se produce un cambio físico, sino también en su mentalidad y en la manera de enfrentarse a la vida. "Este concurso nos hace mejores personas. Valoramos mucho más todo", explicó la jienense. Ella ha aprendido lo que realmente importa en la vida, y por poder comer en condiciones renunció a su pelo. Aunque entre lágrimas y pesar, la modelo antepuso su necesidad de ingerir alimentos, algo que nunca ha echado en falta en su día a día.
Pero si hay alguien realmente agradecido por estar en este concurso ese es el Maestro Joao, quien se abrió en canal con sus compañeros compartiendo unas duras declaraciones sobre su infancia. "De la comunión para atrás ['Supervivientes'] me lo ha devuelto todo. Yo he trabajado desde muy joven, me faltaban grisas. Mientras los demás niños estaban jugando yo me iba a casa a llevar un poquito de dinero", alegó el vidente. Tras pronunciar estas palabras, el concursante no pudo evitar las lágrimas y agradecía todo lo que le ha dado este programa: "A mí el programa me ha dado vida, hasta la adolescencia, me ha dado amor de la gente, sentirme que valía. Me ha dado hasta el acordarme tanto de mi madre".
No llegaba a fin de mes
Joao tiene claro que volvería a participar en 'Supervivientes' las veces que fuesen necesarias, pues "en tres meses me ha dado todo. Si yo tuviese que recuperar lo que el programa me ha dado volvería, lo juro que volvería. Soy otra persona, soy feliz de verdad". Desde plató, su sobrina Lorena corroboró todas y cada una de las palabras de su tío, quien a pesar de haber desempeñado muchos trabajos, como teleoperador, vidente, camarero, peluquero, maquillador.., e incluso de transformista para la mismísima Rocío Jurado, siempre ha tenido que hacer frente a sus apuros económicos. El inicio de todo esto se debe a una triste historia que la sobrina del vidente no dudó en compartir con la audiencia: "Mi abuelo murió cuando él era pequeño y sí que es verdad que mi abuela trabajó muchísimo para sacarlos adelante. Eran cinco hijos y todos empezaron a trabajar muy jóvenes porque había que colaborar en casa".