Evidentemente, como siempre sucede en 'Sálvame', este acontecimiento ha dado para mucho y Lydia Lozano ha tenido que enfrentarse a ello en el diario: "Llevo intentando prepararme para enfrentarme a Albano 20 años, que no son pocos. Ahora me gustaría decir una cosa. No lo he intentado con un profesional. Si yo tuviese un problema con el alcohol y vosotros sabríais si yo me estoy tratando o no, yo porque he sido sincera, pero cada seis meses me ponéis una botella de alcohol delante de las narices, ¿qué psicólogo arregla eso? A mi madre yo no la tengo por qué mandar a un psicólogo".
Lydia Lozano, enfadada, respondía: "Te estoy diciendo que es verdad, pero no yo, la metedura de pata que hice". El colaborador quiso seguir metiendo el dedo en la yaga y le dijo: "Porque profesionalmente te ha afectado y personalmente también pero no te duelen los sentimientos de un señor que ha perdido a su hija y tú le has hecho más daño todavía". La colaboradora no dudaba en responder: "Eso no lo puedes saber. ¿Que no me duele el dolor de Albano? ¿Tú por qué te crees que he pedido perdón? ¿Para que dejase de hablar de mí? Yo pedí perdón porque metí la pata".
El perdón explicado por Kiko Matamoros
El colaborador no dudaba en lanzarle un dardo: "Cómo tienes las narices de decir que Albano dejase de hablar de ti si la que ha hablado de Albano, de su hija, de su tragedia, con datos absolutamente falsos, has sido tú. ¿Sabes cuál es la gran ventaja que tienes? Que Albano no conoce de verdad la intrahistoria de lo que pasó". "La conoces tú, ¿verdad?", decía la colaboradora mientras se escuchaba decir de fondo a Belén Esteban: "Es que lo que tendría que decir Lydia es quién se lo dijo porque igual Albano se llevaba las manos a la cabeza".
Ante esta situación, Lydia Lozano abandonaba el plató diciendo: "Se me dio la libertad de no asistir y ahora no quiero ir, ni que me pongáis caras, que diga Matamoros lo que le salga de las narices. Yo no voy a participar de este juego. Ahora que sea valiente, como si no lo hubiera sido durante años. Me voy a salir fuera y deberíais respetarme. Que cuente lo que le dé la gana". Pues bien, ha sido Kiko Matamoros el que ha decidido contar la historia del famoso perdón: "Da una serie de informaciones acerca de un club de campo con su supuesta pareja, de un restaurante donde va Ylenia a comer, ella dice que tiene dos hijos mulatos".
"Una serie de barbaridades. Cuando un profesional se desplaza allí y ve que todas las pistas son falsas, que los datos son falsos, que la casa donde dice que vivía no existe, que el restaurante está cerrado. Nadie reconoce esa cara ni tiene nadie ni idea. A ella la manda allí el programa para que desmienta la información, para que pida perdón. Cuando vuelve de Santo Domingo le dice a los responsables de 'A tu lado', que no solo es verdad lo que cuenta, si no que trae más datos y se niega a pedir perdón", continuaba diciendo .
Tras esto, añadía: "Lo haces porque te obligan, porque los directores no se vuelven locos como tú, porque tienen un poco de vergüenza torera y te dicen 'Lydia, con esta información que tienes, que se ha demostrado que es falsa, no podemos admitir que sigas, tienes que pedir perdón' y pidió perdón con una espada en el pecho porque si no no lo pide. Tienes las narices de decir que has pedido perdón sinceramente y de decir que fue voluntario. ¿Si no te dicen que o pides perdón o te vas a la calle no hubieras pedido perdón?".