La primera expulsada del programa no aguanta más en la isla y está deseando marcharse cuando antes a casa.
Lola se convirtió en la primera eliminada de 'Supervivientes 2021', después de que perdiera el duelo contra Olga Moreno y fuera trasladada a la Playa Destierro. De esta manera ha descubierto en el lugar en el que se encontrará durante un tiempo, y en el que además estará completamente sola, algo que ya ha comenzado a hacer sus estragos, puesto que rompió a llorar en cuanto supo la localización en la que iba a vivir.
"Llevo muy mal la soledad. Tiene pinta de haber de todo. Me puede dar algo con los vendavales que ha habido durmiendo aquí sola en esta selva llena de bichos", empezó protestando. Los insectos le han acribillado y encontrar algo de comer está siendo misión imposible, por lo que cada vez está sintiendo más angustia. "Estoy muy mal, lo juro por mi abuela que me quiero ir. Me encantaría que me vierais cantando y bailando, pero es que no estoy bien, de verdad. Estoy muy decaída, intento hacer cosas para animarme, pero al final me derrumbo. No quiero estar aquí", ha dicho entre lágrimas, asegurando que quiere marcharse."Me gustaba estar con mis compañeros. No me gusta estar aquí, comiendo arroz que me sienta fatal a la tripa. Qué asco de vida. Encima me han picado los insectos", le ha dicho a Jordi González. "Dicen que mezclar tierra con orina, como la orina tiene amoniaco puede bajar el hinchazón. ¿Lo has intentado?", le ha animado el presentador, pero ella no hacía otra cosa que derrumbarse.
Pero en medio de esta tristeza y desaliento ha recibido una 'visita' inesperada, algo que ha conseguido que su actitud cambie por completo. Lola tenía que abrir 8 caracolas. Si lo conseguía, podría disfrutar de una deliciosa pizza y más tarde ha sido cuando ha descubierto quién era la supuesta visita. Feliz aunque sea de mentira
"¡Un Horus de carón! "¡Horusete!", ha dicho muy emocionada, refiriéndose a una figura de cartón con el cuerpo de su perro. "¡Ojalá fuera de verdad!", ha seguido diciendo. Fue en 'La isla de las tentaciones' donde Lola dejó claro lo unida que estaba a su mascota Horus. Una de sus preocupaciones en dicho programa era qué iba a pasar con su perro en caso de romper su relación con Diego, e incluso llegó a decir: "Sin un tío puedo tirar para adelante, pero sin el perro no. Es humano, no hay otro perro como él", pero por suerte aunque lo hayan dejado los dos pueden disfrutar de su compañía con una especie de 'custodia compartida'.