El modelo asturiano también ha dicho que no se cree la relación de la de Pamplona con Alejandro Albalá, y este ha contestado.
'Supervivientes 2018' terminó con Sofía Suescun y Logan Sampedro enfrentándose por hacerse con la victoria. Finalmente, fue la de Pamplona la que se proclamó ganadora de la última edición del programa, pero la rivalidad entre los dos concursantes no ha terminado y ambos se dedican dardos envenenados de forma constante. Para empezar, el de Oviedo no dudó en desprestigiar a la ex gran hermana afirmando que no era "una justa ganadora", y que él se merecía más el premio de los 200.000 euros. Ante estas declaraciones, la dueña del maletín lo llamó "reventado" y dejó caer que el modelo todavía no había superado el intento de affaire que tuvieron en la isla.
Lejos de zanjar el asunto, Sampedro se ha dejado caer por el plató de 'Socialité' para someterse a las preguntas de María Patiño, la presentadora del programa. Allí ha recalcado que Suescun no se merecía ganar 'Supervivientes 2018', y no se lo piensa dos veces a la hora de volver a proclamarse a sí mismo como el verdadero ganador del concurso: "Hice un programa de diez. No pude haberlo hecho mejor, no me arrepiento de casi nada. Estoy muy contento con todo lo que hice". Sobre su eterna rival, el modelo ha dado un giro de tuerca y ha revelado que era ella la que, fuera de cámaras, le demuestra que sigue sintiendo algo por él: "Las miradas dicen más que las palabras y las suyas dicen que le gusto. Yo lo noto porque eso se ve". Por lo que a él respecta, Sampedro asegura que no se siente atraído por Suescun desde que se convirtió en el blanco de "la metralleta" de la de Pamplona. Ha reconocido que hay una parte de ella que le vuelve loco, pero también tiene una faceta que detesta y, según él, "hay que valorar el conjunto". Sin ganas de más follones sentimentales, el modelo ha confesado entre pícaras sonrisas que es "más de chicas que de novias", haciendo que María Patiño se pusiera a temblar como un flan. Sin embargo, el de Oviedo dice que ahora ha "guardado la caña de pescar" y que de momento prefiere olvidarse de las mujeres para centrarse en su carrera profesional, en sus amigos y en su familia.
Eso no quita que no se haya animado a dar su opinión sobre la extraña relación que mantienen Suescun y Alejandro Albalá. Los dos han puesto fin a su amorío en numerosas ocasiones, con la sombra de la infidelidad acechando por ambas partes. Parece ser que ahora lo han vuelto a intentar, pero Sampedro solo ve en estos vaivenes emocionales una artimaña para sacar dinero y vivir de la televisión. Casualmente, el ex de Chabelita Pantoja se encontraba en las inmediaciones del plató de 'Socialité' y el equipo del programa no ha tardado en ponerse en contacto con él para que pudiera contestar al modelo. "Parece que si no hablas de la relación mía y de Sofía no interesas, macho", replicó el de Santander. Los dos se enzarzaron en una absurda guerra en la que se acusaban de buscar protagonismo para hacerse unos cuantos platós y ganar dinero, pero Patiño hizo gala de su cordura y zanjó el tema recordándoles que todos ellos trabajan delante de las cámaras y que lo hacen porque quieren.Alejandro Albalá, el hacker informático
Lo cierto es que cada vez son más voces las que aseguran que Albalá se ha aprovechado de Suescun para obtener un beneficio económico. El último en hacerlo ha sido Jordi Martín, paparazzi que colabora de forma habitual en Telencinco y antiguo socio comercial del ex de Chabelita Pantoja. El tertuliano ha revelado que el de Santander le propuso fingir un robado junto a la ganadora de 'Supervivientes', para llevarse él un 60% de lo que el fotógrafo ganara vendiendo las fotos. Además, también lo acusa de haber obligado a la de Pamplona a publicar en sus redes sociales una serie de fotografías con unas gafas de sol de la marca de su exnovio para que ganara popularidad y que este pudiera aumentar su volumen de negocio.
Por si fuera poco, también lo ha acusado de algo tan grave como de intentar pinchar el móvil de Suescun para poder controlar con quien hablaba y si seguía manteniendo contacto con Hugo Paz. De ser así, Albalá habría cometido un delito penado por la ley y podría meterse en un buen lío, pero como era de esperar, el de Santander desmiente todo esto y alega que Martín está dolido desde que él y su otro socio decidieron despedirle porque era "un vago" y porque les debe 2.000 euros. Sea como sea, parece que las polémicas que rodean al triángulo amoroso Sampedro - Suescun- Albalá están muy lejos de acabar y todavía quedan declaraciones y bombazos para rato.