Como una premonición, minutos más tarde Aurelio Manzano podía hablar en directo con la hermana de Ortega Cano, quien había sido apelada directamente en el programa y señalada, de nuevo, como el topo de la familia y la que cuestionó en más de una ocasión la paternidad que el torero tiene con Ana María Aldón. "Al parecer está bastante disgustada. Me cuentan que estaban llorando", era las primeras apreciaciones de la conversación, dejando claro que la actitud de Conchi parecía muy diferente a ocasiones anteriores.
Mientras tanto, la que fuera concursante de 'Supervivientes 2020', pese a estar pendiente de que podría decirse al otro lado del teléfono, reconocía que para nada le resultaba llamativo que su cuñada llamase directamente a un colaborador de televisión para hablar: "Yo creo que lo hace a diario", insistiendo así en el hecho de que la hermana de su marido es la que llama y mantiene informado a los medios de todo lo que pasa en la familia.
Tras colgar el teléfono, Manzano le traslada a Ana Marí Aldón las verdaderas intenciones de Conchi Ortega al llamar en directo: "Evidentemente Conchi está muy nerviosa, está llorando. Ella me hace la invitación de que algún momento podáis hablar y resolver los problemas, todas la dudas que tú tengas. Ella no quiere guerras contigo", aseguraba mostrando una actitud por parte de Conchi muy diferente hasta la conocida hoy en día.
La respuesta de Ana María Aldón
Un guante tendido que, en cambio, Ana María Aldón no parece querer recoger: "Yo no tengo ninguna guerra con Conchi ni con nadie", aunque no dudaba en volver a poner sobre la mesa hechos que le molestaron de su cuñada sin venir a cuento: "o recuerdo cuando vuelvo de 'Supervivientes' yo me encuentro con que me ha llamado 'hija de puta'. Eso es público. Yo ni se lo tomé en cuenta", decía evidenciando así que es algo que de su cuñada hacia ella, nada más