La artista aprovecha los días que tiene bolos en otras ciudades para rentabilizar su chalet en el que además guarda alguno de sus bienes más preciados como una vajilla que le regaló Franco.
Leticia Sabater lleva dedicándose al mundo del espectáculo desde hace más de 30 años y sabe muy bien como hacer fortuna explotando todas y cada una de sus facetas. Pero por si esto fuera poco, ahora la catalana ha emprendido uno nuevo negocio como arrendataria de su propia casa a través de una conocida aplicación de alquiler de residencias vacacionales. Para dar fe de ello, el equipo de 'Sábado Deluxe' se acercó hasta la urbanización para grabar el que podría ser su mejor anuncio publicitario.
Este pequeño chalet está situado en una exclusiva urbanización a las afuera de Madrid donde la propia Sabater asegura haber sido la primera famosa en instalarse allí pero que a día de hoy cuenta con vecino de alto nivel como por ejemplo Paula Echevarría (donde también está construyendo su nuevo e impresionante chalet). El que es el hogar a diario de la presentadora de 'A mediodía, alegría' cuenta con un gran jardín a la entrada con todo lujo de servicios como una gran terraza y un piscina, aunque esta última en el momento de la grabación no estaba en sus mejores condiciones tras haberse roto el motor de la depuradora y lucir un todo verdoso que no invitaba mucho a bañarse.La casa está decorada, como bien ella dice, en un estilo clásico (que la reportera describe más bien como "antiguo") con una suit presidencial con televisión de plasma, sábanas del hilo donde además en los cajones se pueden encontrar los mejores picardías de la artista. Pero esto, aunque lo parezca, lo es lo más sorprendente que se pueda encontrar el inquilino. En el salón comedor se encuentra expuesta en una vitrina una vajilla que le regaló el mismísimo Francisco Franco ("Francis Franco", como le llama cariñosamente Leticia Sabater) que tiene un gran valor económico -y por supuesto sentimental- aunque no quiere dar cifras.
Solamente hay una estancia en la que no se puede entrar y es el cuarto donde la ahora cantante guarda sus bienes más preciados y sus atrezzo para los espectáculos. Por suerte el equipo del programa si ha podido disfrutar de ese pequeño museo hecho por y para Leticia Sabater. Dentro de aquel cuarto cerrado bajo llave están las pelucas que usa en los conciertos (valoradas cada una de ellas en más de 300 euros) y los impresionantes looks (de poca tela, eso sí) que luce en cuanto se sube a los escenarios. A modo exclusiva, ha mostrado uno de estilo navideño que será el atuendo que lucirá para su próximo éxito que será un villancico que se unirá así a la lista de éxitos como 'La salchipapa' o 'Mister policeman'. Sus inquilinos más surrealistas
Ya durante su entrevista en plató, Sabater reconoce que su casita tiene gran éxito entre los turistas y que solo durante el mes de agosto recibió hasta 40 solicitudes de personas que están dispuestas a pagar 350 euros por una noche. No obstante es muy selectiva con quien será el afortunado en disfrutar de tal hospedaje. Pero aún a pesar de pasar un exhaustivo examen realizado por ella misma viendo las críticas a través de la aplicación que usa para alquilarlo, se ha encontrado algún que otro percal. La primera de las historias fue que alquiló la casa a unos jóvenes de unos 20 años que decidieron hacer un fiestón por todo lo alto que se les fue de las manos teniendo que volver de madrugada a su casa alertada porque una ambulancia se estaba llevando a uno de ellos (porque se había pasado con las copas).
Pero la más surrealista hasta la fecha fue la que vivió la pasada noche del viernes 17 de agosto, un día antes de ir a 'Sábado Deluxe'. Ella había dejado libre su casa para una pareja que iba a vivir una romántica noche pero los planes se les complicaron. Finalmente la chica de la pareja tuvo que rechazar el plan a última hora por motivos de trabajo y el chico en cuestión, que había preparado una cita por todo lo alto con mariachis y un catering, decidió invitar a su arrendataria a pasar la noche él para no desperdiciar el festín. Y por supuesto, la cantante, acepto la invitación: "Fue la mejor cita de mi vida", aseguró a los colaboradores del programa. Eso sí, terminada la velada Sabater se retiró de la que es su propia casa antes de la hora de dormir.
Pero aunque todo parecía una maravilla, a la mañana siguiente (y todavía la noche del sábado 18) se encontró con un pequeño imprevisto: la mariscada a la que fue invitada no le había sentado del todo bien: "Yo no estoy acostumbrada a estos lujos y me provocó una cagalera". Sin pelos en la lengua relató que el marisco no le sentó bien al estómago e incluso antes de entrar en plató sufrió un apretón importante: "He dejado el váter de Telecinco 'fisno'".