Muchas veces se ha cuestionado el trabajo que se esconde verdaderamente detrás de la figura del influencer, cuyo trabajo visible a través de las redes sociales parece no demostrar a la opinión pública las horas de dedicación que se esconden detrás de esas fotografías y vídeos que comparten. Pero ha sido ahora Verdeliss, exconcursante de 'GH VIP', la que se ha sincerado sobre el mayor susto de vida a costa, precisamente, del estrés de su día a día como madre de 7 hijos y creadora de contenido.
En el segundo programa de la cuarta temporada de 'Las Uñas', espacio de Atresplayer en el que Sindy Takanashi entrevista a diferentes celebridades mientras les hace las uñas, tenía a la pamplonica como protagonista y el adelanto del programa a dejado a muchos con el corazón en un puño. La youtuber recordaba entre lágrimas un aparatoso accidente que había sufrido tiempo atrás que, pese a saldarse sin ningún daño personal, todavía le cuesta contarlo.
Verdeliss recuerda que "el coche empezó a dar tumbos" mientras conducía por la autopista a 120 kilómetros por hora. Consciente de ello, Estefy recuerda que se dijo a si misma: "En cuanto pueda salgo", pero no encontró una salida cercana por la que poder desviarse. Lo siguiente que recuerda es despertarse "con un ruido a lo bestia", "un golpe a lo bestia" tras chocarse con la mediana a gran velocidad.
En aquel momento sus seis hijos viajaban con ella en la furgoneta y el primer pensamiento que tuvo fue: "He matado a mis hijos por mis historias". Verdeliss confiesa que todo fue fruto del cansancio acumulado durante días -incluso semanas- y finalmente su cuerpo decidió contra su propia voluntad: " Mi cuerpo terminó por reventar ".
Verdeliss y la necesidad de mostrar todas las emociones
Si algo ha caracterizado siempre a Verdeliss es por mostrar su lado más humano a través de sus redes sociales. Saltó a la fama por compartir el parto natural de uno de sus hijos y ahora también enseña que, como cualquier otra persona, también llora y no todo es tan bonito como puede parecerlo en una foto. De hecho, recientemente la pamplonica planteó una reflexión a sus seguidores: " Enseño a mis hijos que está bien mostrar sus emociones, pero enfrente de ellos las escondo, no vaya a ser que muestre mi debilidad. ¡Qué contradictorio! ", reconocía: "Tendré que predicar con el ejemplo y mostrarles que me derrumbo, que me duele un golpe, pero que me duele también un desengaño. Es normal llorar y es normal también resurgir de las cenizas".
