La empresaria también ha hablado sobre cómo vivió el confinamiento durante el tiempo en el que Kanye West estuvo contagiado de Covid-19.
El pasado 17 de septiembre de 2020 se estrenaba la temporada 19 de 'Keeping Up With The Kardashians', la penúltima del famoso reality familiar que llegará a su fin con la temporada 20 que se emitirá a comienzos de 2021. Fue precisamente Kim Kardashian la que publicó el comunicado oficial con el que se daba a conocer la noticia a los millones de fans que el clan tiene en todo el mundo. Desde entonces, se ha especulado e incluso se han dado por ciertos algunos motivos en torno a la cancelación del programa llegando a culpar a la propia Kim, a Kourtney Kardashian y a Kylie Jenner de presionar al resto de la familia para hacerlo.
Ahora, semanas más tarde, la convertida en empresaria multimillonaria ha hablado abiertamente sobre los motivos que les llevó a tomar esta decisión. Fue durante la entrevista par la revista Grazia -Kim se ha convertido en la primera protagonista de la portada a nivel mundial ocupando las portadas de las 12 ediciones de al revista- donde reconoció que las cosas eran mucho más simples de lo que se había hecho creer y que se trata simplemente sobre que "a veces necesitamos un descanso, así de simple".La hija de Kris Jenner reconoce que todo lo que el programa ha traído a su familia "ha sido un sueño para todos" ya que "nunca imaginamos que llegaríamos a la segunda temporada y ahora estamos en la veinte". Un nada desdeñable número al que se suman también un sinfín de spin-offs protagonizados por diferentes miembros de la familia y personajes recurrentes del programa. Por eso, tras 13 años, era el momento de decir adiós: "Ahora tenemos hijos y nos necesitan. Están sucediendo muchas cosas y, aunque sea por un minuto, necesitamos un descanso".
"Fue realmente aterrador"
Durante la entrevista, la también influencer ha hablado también de algo que ha marcado la vida de millones de personas recientemente, el confinamiento por la pandemia de la Covid-19. Tal y como ella misma ha contado, ha sido a principio del mes de marzo cuando peor lo pasó ya que Kanye West dio positivo y tuvo síntomas bastante fuertes: "Fue aterrador y desconocido ya que nadie sabía qué estaba pasando", confesó: "Tenía a mis cuatro hijos y nadie más en casa para ayudarme".
Por este mismo motivo la propia empresaria tuvo que hacer frente a la enfermedad que estaba atravesando su marido poniéndose en riesgo tanto ella como sus hijos. Eso sí, Kim puso todo de su parte para que no hubiese contagio -y parece que lo consiguió-: "Tuve que ir a cambiarle las sábanas y ayudarle a levantarse de la cama cuando se sentía bien. Lo hacía con mascarilla y guantes, era realmente aterrador".