Como ya le dijo al cómico, Matamoros le reclama a la producción 150 euros por cada mención y aparición en calidad de derechos de imagen: "Ya sé quién me tiene que pagar. No os quería denunciar, he dicho que me deis lo mío, mis derechos de imagen, que además os lo he puesto baratito que sois unos putos ratas. 150 euros por las fotos y las menciones. Me debéis 1.650 pavos".
Posteriormente, Matamoros hacía su aparición en el escenario para ser entrevistado como en su día lo hicieron María Patiño y Belén Esteban. Acostumbrado a hacer televisión desde hace muchos años, al colaborador le bastó sacar uno de los regalos que le llevaba al presentador para dar contenido durante casi toda su entrevista. El regalo era una bufanda del jugador de fútbol Vinicius Junior.
"No te la traigo ni como madridista ni reivindicando el Balón de Oro que se lo podían haber dado (...), sino por reivindicar -sin ser un activista a favor de nada ni de nadie- que ha puesto en su sitio el problema del racismo en el fútbol", señalaba Kiko Matamoros. Estos hechos racistas han sido condenados en Palma el pasado mes de septiembre de 2024 con una pena de 12 meses de cárcel y tres años de prohibición de acceso a los estadios a una hombre que profirió insultos racistas a los futbolistas Vinicius del Real Madrid y Samu Chukwueze del Villarreal en los partidos ante el Mallorca.
Como luego descubrió, su tatarabuela fue esclava en Cuba y ella era descendiente de esclavos africanos: "Cuando se suprimió la esclavitud, que España fue el último país en aplicarla, ella se vino a España y tuvo una descendiente, una criatura, que dejó en Béjar en un convento donde se abandonaba los niños". Y tras contar esta historia, Kiko Matamoros volvía a recuperar el mensaje que escondía el regalo que le había hecho a Broncano: "[El racismo] es una puta aberración y creo que tenemos que hacer una sociedad mejor. Y como esto es Televisión Española tenemos una obligación de acabar con el puto racismo. Ya no solo en los campos de fútbol sino en cualquier lado".