El excolaborador inauguró 'El club del espectador' y la malagueña se convirtió en el blanco de las críticas de los espectadores.
Kiko Matamoros ha regresado a 'Sálvame' y parece que lo ha hecho con más fuerza que nunca. Ya avisaba el colaborador de que no llegaba con ganas de dar masajes precisamente, aunque tampoco quería hacer del plató un campo de minas. En lo que si se convirtió el estudio de Telecinco fue en un club de jazz, algo que al marido de Makoke siempre le habría gustado tener. Con mesas frente a un escenario, luz tenue y música en directo, el madrileño inauguró una nueva sección en el programa: 'El club del espectador', en la que los testimonios y las opiniones de la audiencia sobre los tertulianos del magazine se convertirían en los protagonistas. Seguramente, lo que Matamoros ya podía prever antes de su vuelta a la televisión era que el blanco de las primeras críticas de su propia sección sería él mismo. Los espectadores lo tacharon de interesado y de que regresaba a 'Sálvame' solo por el interés económico. "Por dinero baila el perro", dijo uno de los televidentes, a lo que el colaborador respondió: "El que se va sin que le echen, vuelve cuando le da la gana". Lo cierto es que a nadie parecía entusiasmarle que el padre de Laura Matamoros formara parte otra vez de la plantilla del espacio, mostrando su descontento con la idea de la dirección tanto la audiencia como sus compañeros.
Pero poco tardaron en cambiar de rumbo los dardos envenenados del público. Terelu Campos fue la gran dignificada de la nueva sección de Kiko Matamoros. Como viene pasando de un tiempo atrás, las personas que llamaron por teléfono al club del espectador no dudaron en reprochar a la expresentadora su actitud déspota y tirana que se ha ido destapando gracias a los testimonios de algunas personas que trabajaron con ella en el programa de Telemadrid 'Con T de tarde'. "No tengo nada que decir, respeto las opiniones del público. Otra cosa es que las comparta o que eso se corresponda con la verdad", dijo la malagueña.
De Matamoros a 'Mata-Campos'
El conductor del nuevo espacio del programa no dudó en replicar a su compañera que el público la estaba culpando precisamente de mantener esa imagen de mujer respetuosa delante de las cámaras, aunque por detrás eso no se correspondiera con la realidad. "Te están acusando de nadar y guardar la ropa, de que tenga que venir tu hermana Carmen Borrego a defenderte y de que te las tragas dobladas para luego conciliar con tus compañeros porque eres muy lista y no quieres tener problemas", manifestó Matamoros. Después, continuó recordando a Campos lo que los espectadores habían dicho de ella: "eres una persona altiva y despótica, que no se acuerda de los humildes ni de la gente que ha trabajado contigo".
Por su parte, la madre de Alejandra Rubio intentó mantener una actitud conciliadora y expresó a su contrincante que ella intentaba hacer su trabajo tan bien como le fuera posible, a lo que Matamoros rápidamente contestó: "Lo hacías mejor con mamá, de todos modos". Por caprichos del destino, María Teresa Campos se encontraba en las inmediaciones del plató porque había acudido a Telecinco por otra razones y estaba esperando a que su hija saliera para marcharse juntas. Al escuchar las palabras del tertuliano, la veterana periodista no dudó en intentar entrar a 'Sálvame' para dar la cara por su retoña, pero se encontró con un impedimento: el de la propia Terelu, que le dijo a la antigua defensora de la audiencia que si entraba a escena sería ella la que se marcharía. Inmediatamente, la matriarca del clan se dio la vuelta y no llegó a pisar el estudio del magazine.El gesto de la colaboradora fue muy criticado por Matamoros y por otros compañeros, que entendieron que Campos había echado a su madre del plató. Ella se defendió argumentando que lo hizo precisamente por protegerla, ya que la que fuera presentadora de 'Qué tiempo tan feliz' se encuentra delicada de salud y cualquier polémica televisiva puede agravar la situación. Demostrado queda que la nueva sección de Kiko Matamoros provocará más de un quebradero de cabeza a los tertulianos del programa estrella de la cadena, que ya han visto elevadas las tensiones del plató durante el primer día.