Algo que parecía que marcaba el comienzo de la carrera de la pareja hacia el altar, pero nada más lejos de la realidad. El pasado martes 26 de julio reaparecía en el plató de 'Sálvame' y, entre los reproches de sus compañeros, este le restaba importancia al momento: "Yo he dicho dos, tres, cuatro, cinco veces que me quiero casar con Marta, que es lo mismo que digo en ese programa. Evidentemente mis ganas se refuerzan allí porque en 3 meses tienes mucho tiempo para pensar, para agradecer, para desagradecer, para revisar tu vida, y es una de las cosas que traía en la cabeza si ella acepta o quiere", reconocía, aunque aquello no era, ni de lejos, la pedida oficial: "No hay una petición formal de mano, no hay una fecha, pero sí hay un interés".
"Todo puede ser un circo en función del número de payasos que quieran intervenir"
El colaborador asegura que para nada es el espectáculo del que le acusan el resto de colaboradores, sino un gesto sincero, y que el circo lo estaban montando ellos dándole mayor relevancia: "Lo pido porque me sale del alma y como soy sincero y honesto (...) no voy a dar públicamente detalles porque, a lo mejor, quien me acusa a mí de hacer un circo es quien está verdaderamente interesando en hacer un circo (...) Todo puede ser un circo en función del número de payasos que quieran intervenir, pero voy intentar que esto no se produzca por respecto a mi pareja, a mis hijos y a mí".
Motivo por el que, que de nuevo la petición se haga ante las cámaras, era algo que prefería que se hubiese evitado: "A ella no le sienta mal porque ella ya sabía que había hecho esa petición públicamente. Ella me dijo que le parecía muy bien, que me perdonaba, pero que era algo incoherente con lo que ella pretendía. Yo lo hice con la mejor intención del mundo, pero me pude equivocar", reconocía el exsuperviviente su posible error.