Galería: Concursantes de 'Gran Hermano VIP 4'
La relación entre Kiko Matamoros y sus hijos está pasando por una época bastante tormentosa. El reality 'GH VIP 4' habría hecho mella en la familia después de que Laura, la hija de Kiko, se proclamara campeona de la edición, y por eso ahora cada uno seguiría por su camino.
La relación entre los miembros de la familia fue dilatándose, hasta tal punto que Diego, el otro hijo de Kiko, decidió cambiarse el apellido Matamoros por Flores. Laura Matamoros también siente despecho por su padre, pero ella se considera una 'Matamoros'. Ahora el colaborar quiere dejar el tiempo pasar para que todo vuelva a su cauce.
Kiko Matamoros, emocionado
La audiencia ha hablado sobre Kiko y su familia, y por eso ha creído oportuno sincerarse en 'Sálvame' : no renuncia a seguir sintiéndose su padre. Sobre su relación con Laura ha dicho: "Mi relación con mi hija no es que sea excelente pero ni dejo de quererla ni de echarla de menos".
Entre tristeza y emoción, pues lo contó con la mirada hacia abajo y los ojos llorosos, dijo: "No sé si mis hijos, como han dicho, están mejor lejos de mí pero yo, desde luego, no renuncio a por lo menos en el corazón seguir sintiéndome su padre, quererles y que les vaya todo estupendamente".
Su hija Laura hace pocos días habló también sobre su relación con su padre y la futura boda de él con Makoke, y dijo: " Queda mucho tiempo para la boda", "a saber que pasa hasta septiembre", pero no descartó a un colaborador de 'Sálvame' una posible reconcilación, diciendo: "La habrá, la habrá". Por lo que si sucede antes que la boda, a lo mejor se convierta en la invitada de honor. A ver si con suerte hay una temprana reconcilación.