Toño Sanchís tiene ya demasiados frentes abiertos. El último es el que mantiene con Kiko Matamoros, quien asegura haberse desvinculado totalmente del representante después de conocer las acusaciones que lanzaba hacia Makoke a sus espaldas. Tal y como pudo saber el colaborador de 'Sálvame' gracias a algunos de sus compañeros de programa, entre ellos Belén Esteban, Toño Sanchís acusaba a su mujer de tener un comportamiento desleal, una afirmación que ha ido demasiado lejos para Matamoros.
"Me había utilizado para lucrarse" decía Kiko Matamoros en 'Sálvame Diario'. El fin de su relación, tanto de amistad como laboral, con Toño Sanchís ha llegado y en absoluto tiene esto que ver con la encarnizada batalla que mantienen el representante y Belén Esteban, algo que se sitúa totalmente al margen de la vida de Matamoros. Sin embargo, si hay algo que el colaborador no estaba dispuesto a tolerar era que se hicieran acusaciones infundadas contra los miembros de su familia. "Toño Sanchís le dijo a Belén que mi mujer me era desleal" aseguraba Kiko Matamoros.
El colaborador orgulloso ha confirmado en varias ocasiones que él nunca ha hablado mal de Toño Sanchís por lo que no entiende lo que ha recibido a cambio del buen trato que le ha brindado siempre al representante. La relación entre ambos no volverá a ser lo que fue, principalmente porque Kiko Matamoros no quiere saber absolutamente nada de Toño Sanchís y está seguro de que nunca volverá a trabajar con él. De esta forma se ve cómo Sanchís continúa con sus múltiples enfrentamientos televisivos, aunque sin duda el más fuerte es el que mantiene con Belén Esteban, a la que en su día estuvo muy unido.
El novio de Jesús Tomillero y su urgencia
Aprovechando el protagonismo, Kiko Matamoros quiso soltar un bombazo relacionado con uno de los concursantes de la 'Sálvame Snow Week'. Según el colaborador, Jesús Tomillero recibió la visita de su ya exnovio en Panticosa y ambos disfrutaron de una noche de amor en una romántica cabaña en el bosque. Hasta aquí todo parecía normal hasta que a David, la pareja en cuestión, se le presentó una urgencia escatológica. El baño se encontraba en el exterior, en el que además había 10 grados bajo cero por lo que el chico en cuestión pensó que sería buena idea utilizar la papelera a modo de váter para no tener que enfrentarse al frío. Así es como se convierte una noche romántica en una verdadera noche inolvidable.