"Me he emocionado", decía con la voz rota. "A partir del martes cuando nos lo comentaste a Kiko y a mí nos vino un baño de nostalgia. Yo la verdad es que intento contenerme y acordarme de todo lo positivo que tenía Mila, de su figura, de su cariño, de lo que nos hemos querido cuando estábamos a palos y, sobre todo, agradecerle el trato que tuvo siempre con mis hijos y con la gente que sabía que yo quería de verdad", decía Kiko Matamoros emocionado.
El colaborador continuaba diciendo: "Cuando le dije que me iba a cambiar de casa me dijo que esa entrevista me la tenía que hacer ella y no pudo ser. Me da mucha pena pero tengo unos recuerdos grandísimos de ella. Teníamos tanta complicidad porque éramos iguales. Cuando me fui del eje del mal a la mesa de enfrente y no nos hablábamos, nos descojonábamos vivos". Además, ha aprovechado para explicar cómo fue su reconciliación tras meses enfadados.
"Yo de los recuerdos más bonitos que tengo de ella es cuando nos cruzamos en los tornos de la entrada de Telecinco que venía de 'SV' y cuando se fue estábamos peleados. Nos dimos un abrazo y se enterró todo porque entendimos que estábamos haciendo el imbécil. La verdad es que es muy difícil porque han sido muchos años", decía muy emocionado Kiko Matamoros.
Son una familia
Kiko Matamoros ha hecho alusión a todo el tiempo que llevan siendo amigos: "La conocí en Sevilla nada más separarse de Manolo, teníamos amigos comunes en Marbella... Conocía todas mis intimidades. Para mí ha sido una compañera increíble, ha sido una grande de la televisión, ha sabido hacer espectáculo. He disfrutado muchísimo con ella". Además, asegura que insistió mucho en la relación con sus hijos: "Mila, con mis hijos, ha sido la más pesada de todos. Siempre estaba con el acércate a ellos, es lo que te va a merecer la pena".
"He hablado con más compañeros. Me llamó Belén rota, llorando. Hablamos Kiko Hernández y yo y decidimos mandar esa corona que es un homenaje a Mila y un homenaje a muchos años de felicidad compartida en ese plató de complicidad, cariño y admiración", decía emocionado haciendo alusión a la corona de flores que mandaron al tanatorio en la que se podía leer 'El eje del mal no te olvida. Siempre juntos'. Un adiós que nadie quisiera haber dado tan pronto.