Kiko Matamoros ha vivido uno de los momentos más especiales de su vida, su boda con Makoke. Fue un día de lo más especial en el que todos disfrutaron a lo grande, pero estaba claro que no iba a estar exenta de polémica. Una exclusiva sobrevolaba la boda y, tan solo unas horas después de su 'sí quiero' el pasado viernes 16 de septiembre, ya se estaban filtrando fotografías de la ceremonia.
Matamoros entró por teléfono en 'Sálvame diario' para hablar acerca del topo que había vendido las fotografías de la boda. Comenzó diciendo que él no era quien para prohibir los móviles en su boda: "No iba a poner a la Gestapo a cachear a la gente". Además añadía: "No me hubiera merecido la pena privar a la gente de móviles".
El colaborador aseguró que las fotos se habían vendido a Diez minutos, es decir, que no se habían filtrado sin nada a cambio. Además, decía que haría todo lo posible por encontrar al topo porque solo podía ser un amigo, familiar o acompañante. Comentó que no iba a ser difícil encontrarlo y, menos aún, el topo que filtró las de Vanitatis.
"Sabré quien ha filtrado las fotos de mi boda y le apartaré de mi vida", explicaba Matamoros. Sobre Makoke explicó que se sentía bastante decepcionada, más que él, porque le pesa saber que hay alguien que le ha traicionado. Dejó claro que no duda de Kiko Hernández para nada, "pongo la cabeza por Kiko en ese sentido", añadía.
Sospechas en 'Sálvame'
Tras comentar lo del topo en el programa, comenzaron las sospechas en torno a quién podría tratarse del que ha filtrado las fotografías. La foto de la discordia es una en la que sale Carlota Corredera con Raúl, director de 'Sálvame' y otra trabajadora, junto a los novios. Esa foto fue enviada por la presentadora a María Patiño y, otro de los colaboradores que la tenía era Jesús Manuel. Todas las sospechas se centraron sobre él porque, además, trabaja para Vanitatis. Veremos si algún día sale a la luz el topo de la boda.