"Yo estoy mal, pero Sofía lo está pasando realmente mal. Es una situación muy delicada. No es un circo, Maite no está bien, necesita ayuda", era lo primero que decía tras ver algunas de las declaraciones de la exconcursante de 'Gran Hermano': "Anoche fue muy duro ver a Sofía así. Es muy desagradable ver a una madre públicamente hablando así de ella y de mí, sobre todo después de cómo se ha portado siempre Sofía con ella".
Kiko Jiménez asegura que él no tiene nada que ver con lo que ha ocurrido porque ni estaba cuando se produjo la bronca entre madre e hija y porque tampoco vive ni con su pareja ni con su suegra: "Todo ocurrió el domingo día 4 y me llamó Sofía con un ataque de ansiedad (...) Yo no vivo con Sofía, yo tengo mi propia casa, yo no he echado a nadie de casa y siempre he respetado la relación entre madre e hija".
"Luego cuando ocurra alguna desgracia nos echaremos las manos a la cabeza"
Este asegura que no quiere hablar más de la cuenta por la gravedad que reviste la situación: "Luego cuando ocurra alguna desgracia nos echaremos las manos a la cabeza, es un tema muy delicado y muy grave. Necesita ayuda", pero llegados a este punto y ante lo sucedido no descarta tomar medidas legales: "Tomaremos las medidas que tengamos que tomar tanto como yo como su hija. Todo lo que dice es totalmente falso".