Según informó 'Sálvame', programa en el que colabora Kiko Hernández, la pareja de amigos se trasladó a Melilla el 30 de diciembre. No iban solos, les acompañó también la niñera que trabaja para Kiko Hernández. Los tres se fueron de fiesta la noche de fin de año y los compañeros del programa para el que trabaja el exconcursante de 'Gran Hermano' pudieron captar cómo los tres llegaron a altas horas de la madrugada al adosado del cuñado del amigo de Kiko Hernández.
El día 2 de enero, ya de mediodía, la pareja de amigos dejó a la niñera en otra estancia y Fran Antón y el colaborador paseaban por las calles de Melilla. Se dirigían al Club Marítimo de dicha ciudad, donde un amigo les introdujo en el lujoso y exclusivo lugar. Un testigo del lugar corrobora a los infiltrados de 'Sálvame' que la primera vez que entras en dicho club "te piden en torno a 5.000 o 6.000 euros, ahí no puede entrar todo el mundo".
Un viaje familiar y planificado
Lo que sin duda se salía de los planes del que fue concursante de la tercera edición de 'Gran Hermano' era que un equipo de su propio programa monitorizase todos sus movimientos. "Han dormido en la misma casa, siempre salen juntos en el mismo coche y todo indica que están viviendo juntos", decía la periodista de 'Sálvame' desplazada a Melilla.