Para presentar la serie de Netflix, Kate del Castillo abandonó Estados Unidos, donde reside al contar con la nacionalidad de este país y no poder regresar a su México natal. La actriz viajó a Madrid, donde Bekia tuvo la oportunidad de entrevistarla en el Hotel Ritz de la capital, en un soleado día de primavera. Simpática, imponente y natural como pocas, la intérprete contestó a todo, no eludió ningún tema, y comentó sin tapujos hasta los hechos más espinosos de su biografía reciente, además, claro está de hablar de la serie que tantas cosas buenas le ha dado.
Preguntada por si Emilia Urquiza tiene alguna similitud con Angélica Rivera, actual Primera Dama de México, Kate del Castillo se mostró rotunda: "¡Dios me libre! No, no tiene nada que ver. Eso fue algo polémico para México porque pensaron que tenía que ver y al parecer no me quiere mucho el Gobierno mexicano, y ella en especial, por unas declaraciones que yo hice", señaló del Castillo en referencia a unas palabras que soltó en 2015 en referencia al escándalo por la lujosa mansión propiedad de la esposa de Enrique Peña Nieto que Kate del Castillo no entendía cómo podía haber pagado con el sueldo de Televisa.
Para que quede claro, la estrella matiza que 'Ingobernable' es ficción, con tintes políticos "y tocando temas que son fuerte y dolorosos para México. Yo no podría ni como actriz, ni como mexicana, hacer una serie donde estás hablando de la presidencia sin tocar temas que son importantísimos para México". Continuando con el tema de Primeras Damas, la protagonista de la serie asegura que vio películas y documentales de esposas de presidentes reales e interpretadas por actrices, "pero al final ella es primera dama tres minutos... realmente lo hice pero no me inspiré... ella se va sorprendiendo con la vida, se va sorprendiendo con lo que va sucediendo y va sobreviviendo constantemente y yo quise sorprenderme con ella".
Protagonizar 'Ingobernable' ha sido una experiencia preciosa y única para ella, pero ha tenido que capear con situaciones complicadas: "Ha sido una lucha constante de un montón de cosas, a pesar de toda la controversia, a pesar de todas las adversidades, logramos hacer una serie donde el personaje principal es México, y la protagonista no está en México. Fue un reto muy duro tanto para Argos (la productora mexicana) como para Netflix, y desde luego para todos los actores, porque es muy difícil estar trabajando con una doble como si fuera yo. Para mí fue totalmente frustrante. Lo primero no poder ir a mi país y segundo no poder hacer mi personaje completo", aseguró la actriz, muy triste por no poder entrar en su país. Ella sabe que lo más fácil hubiera sido coger a una doble, y por eso está muy agradecida a Netflix porque siempre contaron con ella: "Yo firmé el contrato antes de que se supiera nada, yo sabía lo que iba a pasar, yo hice la travesura, pero no me imaginaba lo que iba a pasar. Nadie sabía nada, es increíble lo que son las cosas... estábamos grabando en paralelo a lo que estaba ocurriendo en mi vida... ". Su investigación, y el hecho de no poder pisar México llevó a tener que cambiar ciertas cosas para poder grabar en San Diego. "Cuando me citaron pensé que iban a romper el contrato, estaba todo tan mal en mi vida que pensé que era lo más lógico. Me dijeron: 'Netflix está contigo hasta el final'. En esos momentos que me sentía sola en el mundo y contra el mundo y que te apoye una empresa como Netflix así y no sé cuántas veces más caro, pero espero que les haya valido la pena... vamos a ver cómo le va, imaginate qué trauma para mí si va mal..."
Lejos de México
Además, aunque le duele, manifiesta que no volverá a su tierra hasta que no se cierre la investigación contra ella por lo del Chapo Guzmán: "Habían cerrado la investigación, pero me abrieron otra, yo no confío. Hasta que mis abogados no me den luz verde no voy a ir a México, no tengo ninguna prisa". Aunque no puede volver a casa, México está en su corazón, y por eso también está encantada de lo que muestra 'Ingobernabe': "Que sepan de México tal cual es, como mexicana me llena de orgullo, con todo y todos los defectos y las cosas terribles de México, como la corrupción. Vas a ver un México tal cual es, no como te lo quieren pintar. Sin demonizarlo ni glorificarlo, tal cual es y cómo este México con su riqueza y su cultura, que es hermoso, pero también su parte marginal, que es Tepito, la parte más baja de México. Cómo se unen esos dos mundos, y mientras toda la clase media que no vemos, que no tenemos. Creo que es interesante para cualquier país porque habla de un gobierno que es corrupto; creo que todos los gobiernos son corruptos, pero los mexicanos ya nos estamos pasando de lanza, que somos tontos... no lo sabemos ocultar bien. Pero en realidad es un tema que le atañe a todo el mundo", comenta Kate del Castillo, hastiada de la situación que vive su país desde siempre. Lo cierto es que ni pudo grabar en México ni ha podido promocionar la serie allí.
Su escena más dura y el proyecto del Chapo Guzmán
En cuanto a la escena más dura, una vez más tira de biografía y aprovecha para denunciar la violencia de género y de paso el acoso que sufrió por lo del Chapo: "La escena más dura fue en el primer capítulo cuando nos golpeamos el presidente y yo. Fue muy fuerte, yo también he vivido violencia doméstica y son situaciones muy fuertes, vivimos en una época en la que no deberíamos estar las mujeres luchando con eso, como hace décadas y décadas. La violencia de género es terrible, es muy triste y no puedo no identificarme con esa escena en particular. Por otro lado, pasaron muchas cosas durante todo esto, salieron unas fotos mías con Chapo que volvieron a decir que si yo había estado con ellos... siempre sacaban mi foto... venían agentes de la DEA a la grabación...". En ese sentido, reconoce que hasta 8 agentes de la Agencia Antidroga de EEUU se presentaron en el rodaje: "Yo temblaba, imáginate el show de que me arresten, con las cámaras... eso le hubiera encantado al Gobierno Mexicano, pero yo desde luego no sabía si solo miraban, si querían llevarme si iba a tener que dejar la producción... mi seguro para que me contraten se subió mucho más. Yo no puedo poner en peligro a la producción. Llamé a mi abogado mexicano y le pregunté: '¿Qué me pueden hacer?' Él me dijo que nada, pero lo pasé mal igualmente".
No se puede evitar hablar sobre su proyecto sobre el Chapo Guzmán. Ha sufrido mucho por su vinculación con el narco, pero sigue adelante con el proyecto: "Va a ser grande, porque además la que tiene los derechos de su vida, de alguien que vive, soy yo. Van a ver miles de proyectos, incluso Netflix, ellos no lo están produciendo pero la van a distribuir y me lo dijeron. Yo no voy a dejar de hacer lo mío, porque lo interesante es que él está vivo y me dio los derechos a mí. Quiero entrevistarle a la cárcel, ahora es más fácil porque está en Nueva York; no tendría por qué ir yo, podría ir un escritor, pero necesitamos permisos, y hasta que no termine mi situación legal, no quiero enfocarme en otra cosa porque no tengo cabeza. No sé si sería cine o película... si la quisiera hacer Netflix sería una serie, o si la quiere otro, sería una película larga. Sean Penn tiene que ver todo en lo que sucedió, pero en la película para nada, Dios no lo quiera. Los derechos son míos". Para terminar, Kate del Castillo habló sobre situación sentimental. Tras dos divorcios y con los problemas legales que tiene, no tiene mucha intención de enamorarse, aunque lo peor de todo parece ser que no se le acercan los hombres, eso sí, ella se lo toma con mucho humor, ese del que hace gala tantas veces para hacer todavía más cómoda la entrevista: "¿Tú crees que alguien se me va a acercar con todo lo que me ha pasado? Si de por sí ya me tienen miedo, con esto ya está peor... he vuelto a ser virgen (risas)". Sin duda, Kate del Castillo es una mujer ingobernable.