Pero el motivo que le ha llevado a asistir al programa es el peculiar proyecto en el que se encuentra inmerso, una residencia canina que ha abierto en San Sebastián de los Reyes. Lejos ya de las plazas de toros, el exdiestro se ha embarcado en el mundo empresarial.
No podía faltar en la conversación Rocío Carrasco, el miembro más polémico de la familia y que estos días está dando mucho que hablar por su falta de implicación en la apertura del museo de Rocío Jurado, pues tiene la última palabra para que ese proyecto salga a la luz. "Yo soy de los que querría que estuviera abierto hace mucho tiempo", ha manifestado Ortega Cano.
Fidel Albiac, tan culpable como Rocío Carrasco
Ortega Cano también ha hablado de los momento más duros de su vida, como la muerte de Rocío Jurado: "Ese fue el peor momento para mí. Tras su muerte me quería morir". Tampoco su infancia fue fácil, pero eso le ha ayudado a ser fuerte ante la vida, y ha comentado: "He vendido churros en Vallecas y uvas en la puerta del Sol durante mi infancia. Esa dureza de la vida te hace ser fuerte luego". Experimentar momentos más duros le han hecho resurgir "como el ave fénix".