Los concursantes han tenido que decir adiós a la aventura del cocinado tras una prueba en la que no han brillado.
Una semana más, los aspirantes de 'Masterchef Celebrity 9' han tenido que hacer frente a tres pruebas de lo más complicadas para ir superando cada paso y así conseguir salvarse una semana más. La primera prueba ha sido la mítica que todo el mundo espera, la de los robos. Todos los concursantes han tenido que robar diez ingredientes de las cestas de los compañeros y algunos se han quedado tiritando. Hiba Abouk era le encargada de empezar con los robos y Raúl Gómez era quien se quedaba en el último lugar, lo que le hizo no tener la oportunidad de robar el ingrediente principal que los demás sí habían robado: la costilla. La mayoría pensaba que tendría que trabajar con lo que le habían dejado en la cesta pero la realidad fue que tuvieron que cocinar con lo que habían robado.
Inés Hernán fue la mejor en esta prueba y tuvo que ejercer la doble capitanía en la prueba de exteriores, donde hicieron un homenaje a todos los mayores acompañados por las ganadoras de 'Masterchef Abuelos', Almudena y Guadalupe. La prueba no fue nada fácil y finalmente se fueron a la eliminación Inés Hernán, Raúl Gómez, Pitingo y Marina Riverss, teniendo que enfrentarse a una difícil prueba de eliminación.
Nueva eliminación
Los aspirantes que se encontraban en la cuerda floja han tenido que replicar un plato del chef Paco Morales donde el ingrediente principal eran los frutos secos. Las primeras en mostrar los platos fueron Inés y Marina, quienes lo hicieron bastante bien, quedando descartadas desde el primer momento de la eliminación. Raúl Gómez y José Lamuño no lo hicieron demasiado bien y Pitingo tuvo "luces y sombras" como le dijeron.
Finalmente fueron dos los expulsados de la noche, dejando a los compañeros completamente impactados. Raúl Gómez y José Lamuño tuvieron que abandonar las cocinas y Gómez no podía contener las lágrimas al irse: "Lo he vivido todo con una intensidad brutal y me encariño mucho con las personas y decir adiós cuesta. Soy muy disfrutón, hoy ha sido un desastre y me da pena decirles adiós. Muchos son amigos para toda la vida. Me gusta disfrutar de la vida, que la vida mola. Intento dar siempre lo mejor a todo", decía emocionado. Lamuño, expulsado por segunda vez tras ser repescado, decía: "Mi objetivo era volver a entrar, era vivirlo, porque me había quedado con un clavo difícil de gestionar y me voy lleno de los corazones de mis compañeros". Sin duda, una noche de lo más emocionante donde han tenido que decir adiós a dos compañeros a los que han cogido muchísimo cariño.