Lorenzo no estuvo solo en su paso por el programa, su madre, María, se unió también a la cita y además agasajó a anfitrión e invitado con su deliciosa comida, unas berenjenas rellenas típicas de Mallorca, lugar de nacimiento del campeón. El presentador Juan y Medio también quiso visitar 'Mi casa es la tuya', ya que, como él mismo confesó, es un apasionado del mundo del motociclismo.
Una vida llena de elecciones difíciles
La velocidad es algo que corre -y nunca mejor dicho- por las venas del mallorquín. Su padre le inculcó desde pequeño la pasión por las motos y su madre había sido piloto en su juventud, por eso no es nada extraño que ser piloto profesional fuera su sueño y con tan sólo tres años Lorenzo ya se montó en su primera moto. Perseguir esa meta fue lo que le llevó a dejar su Mallorca natal para ir a Barcelona, una decisión difícil, pero a la larga acertada. Además, siendo pequeño tuvo que decidir entre los estudios y las motos: "En la vida no puedes hacerlo todo, cuando entras en un deporte o en un trabajo que es tan competitivo o le dedicas todo tu tiempo o no llegas a nada", explicaba el motorista.
Parecía que todas las decisiones controvertidas ya habían sido tomadas, pero llegó otra, de nuevo una dicotomía, la cual tenía como protagonistas a su padre y al que por aquel entonces era su manager: "Mi ex-manager tenía problemas con mi padre por las formas de ver el rumbo de mi carrera y al final tuve que decidir entre uno y otro. Decidí irme con Dani (su ex-maganer) porque con él era con quien podía continuar mi carrera. Luego tuve problemas con él fuera de la profesión y vi que tenía que separarme", confesaba Lorenzo.
Las dos (NO) retiradas
Viendo las elecciones que tuvo que tomar el piloto a lo largo de su vida parece que siempre ha tenido muy claro cual era su meta. Sin embargo, estuvo a punto de dejarla en dos ocasiones. "He tenido miedo a ir en moto", confesaba, "al principio todo me parecía fácil. En una carrera tuve un golpe espectacular, me llegué a romper los dos tobillos, pero no me asustó. Me caía, me lesionaba y volvía a circuito. Me salía bien". El mallorquín cogió la mala costumbre de accidentarse y volver inmediatamente a la pista, algo que ponía su salud y su propia vida en juego, hasta que llegó el momento que le hizo repensar su forma de trabajar: "En una caída me desperté en el hospital sin acordarme de nada. Ahí empecé a tener miedo: 'Me puedo matar', pensé. Me entraron ganas de dejarlo, no sabía si era lo mejor arriesgar la vida de esa manera".
"En otra caída, con 14 años, estaba convulsionando en el suelo. Mi padre vino corriendo y me dijo: 'Hijo, vamos a dejar esta mierda, no vale la pena', y yo apreté los dientes y dije: 'no papá hay que seguir'", contaba emocionado el deportista.
Todas estas hazañas han hecho que para muchos deportistas Lorenzo reciba el calificativo de héroe, algo para lo que tiene su opinión: "A mi me pagan por hacer lo que me gusta. Los héroes son los que trabajan para que su familia no pase hambre".
La fama de prepotente
Otro de los adjetivos que han acompañado a Jorge Lorenzo a lo largo de su vida ha sido el de 'chulo': "Tenía fama de chulo y prepotente, pero era una defensa para no mostrar mi timidez y simular ser fuerte. Nunca me he sentido superior a los demás".
Poco a poco, el mallorquín ha ido superando esa fama de prepotente en el deporte, mérito tanto de su madre como de él mismo: "Era mi madre quien me decía que tenía que bajar el tono, quien me sosegaba. Yo mismo me fui dando cuenta de todo lo que hacía y lo que representaba, me fui volviendo más empático, lo que no quieres que te hagan a ti no se lo hagas a los demás, eso es lo que pienso".
La rivalidad entre Dani Pedrosa y Valentino Rossi
Competitividad es el adjetivo por excelencia del deporte y es, probablemente, lo que ha creado un halo de 'enemistad' entre el invitado, Dani Pedrosa y Valentino Rossi. Sin embargo, eso es algo que el campeón quiso aclarar: "De Dani puedo decir que no somos amigos, pero casi. Los dos teníamos nuestro pique porque queríamos ser el mejor piloto español, pero eso es algo normal. Además, nuestros managers eran rivales cuando fueron pilotos...Ha sido algo difícil".
"Con Rossi...", titubeaba, "dos compañeros de equipo lo tienen difícil. Dicen que tu primer rival es tu compañero de equipo. Si te gana alguien con tu misma moto lo tienes difícil". Si bien, el mallorquín demostró un gran talante al reconocer que el italiano es un gran piloto: "A pesar de que no me llevo muy bien con Rossi, es un piloto que ha aportado mucho al motociclismo. Lo admiro mucho y siempre intento aprender de él".
De hecho, la última nota de la velada fue una conciliadora, ya que el presentador lanzó el siguiente reto: "¿Qué me dirías si te dijera que estoy preparando una quedada con Dani Pedrosa y Valentino Rossi?", a lo que Lorenzo respondió acorde con el carácter que demostró en la entrevista: "Te diría que encantado".