Jordi Sánchez ha vivido uno de los peores momentos de su vida porque ha sido una de las personas que se ha contagiado de coronavirus y ha tenido que estar ingresado en la UCI durante 24 días. El popular actor ingresó en la Fundación Jiménez Díaz y temió no salir de la misma porque tuvieron que inducirle el coma e intubarle durante todos esos días. Poco a poco, la grave situación fue remitiendo y ahora puede contar la experiencia vivida.
El actor ya ha hablado en alguna ocasión desde que salió del hospital pero esta vez ha reaparecido en televisión para contar cuál fue su experiencia durante su ingreso y tras ser desentubado después de 24 días. Hilario Pino era quien le hacía la entrevista para 'Más vale tarde' y Jordi Sánchez le confesaba el mal momento que vivió: " El coma inducido es un horror, te levantas muy confundido y sin saber si tus delirios eran reales. Pensé muchas cosas y todas desagradables, no sé porque me dio por ahí".
Además, también aseguraba que había sido una situación muy delicada para toda la familia: "Terrible para toda la familia, mi madre, mi pareja, mis hijos...". Jordi Sánchez asegura que el momento en el que le sacaron del coma fue muy extraño: "Yo no podía ni andar y todo el mundo estaba feliz, y no entendía nada. Estaba desesperado porque me notaba hecho un desastre".
Recuperación y mensaje de concienciación
Lo cierto es que Jordi Sánchez lo ha pasado muy mal pero ahora se está recuperando bastante bien a pesar de haber perdido ocho kilos: "La recuperación está siendo rápida". El actor ha contado que después de estar un mes alimentándose con una sonda vasogástrica "ahora estoy feliz porque he podido comerme un arroz, que tenía muchas ganas". También ha explicado que está yendo al fisio para coger masa muscular tras la gran pérdida de peso.
Para cerrar el tema, Jordi Sánchez ha querido mandar un mensaje de concienciación a todos esos jóvenes que hacen fiestas ilegales: " Yo entiendo que con 20 años uno tiene muchísimas ganas de fiesta y es muy complicado gestionarlo, pero nos ha tocado esto, y a mis abuelos les tocó ir a la guerra. A cada uno le toca lo que hay y tienes que hacer un esfuerzo. Si no no vamos a acabar con esto nunca. Te da la sensación de que esto no va a terminar nunca". Además, aseguraba: "Siempre piensas que esto le va a pasar a otro y que no vas a llegar a este extremo".