Las claves del spin-off
La nueva serie retoma el dolor de Carrie, el personaje de Sarah Jessica Parker y presentará una actualización en su discurso después de las negociaciones de Cynthia Nixon, que exigió nuevos mecanismos para asegurar la representación de las minorías: "Una parte de los motivos por los que queríamos volver a hacer la serie es volver atrás y tratar de enmendar los errores que pudiéramos cometer", aseguraba a Elle.
También reveló en Herald Sun algunas de sus conversaciones con el equipo, donde planteó sus requisitos para volver al proyecto: "Cuanto más hablaba con Sarah Jessica Parker, el creador y guionista Michael Patrick King y Kristin Davis sobre las tramas, me daba cuenta de que no podía regresar sin un verdadero cambio radical en términos de la falta de diversidad en la serie original, estaban a bordo".
Unos requisitos que llegaban después de revelar la transexualidad de su hija, que le ha convertido en una persona mucho más combativa por los derechos del colectivo LGTB: "Una vez un padre contó que se había planteado si le compensaba más tener una hija viva o un hijo muerto. Es una decisión muy fuerte", aseguraba para concienciar a los padres de personas del colectivo sobre su realidad.