Una infección
Todo parecía ir bien y Joaquín Torres confiaba en que su recuperación y su salida del hospital estuviera más cerca. En cambio, unos días después de la operación de cadera, le comunicaron que tenía una infección y que su ingreso en el hospital se iba a alargar dos semanas más, como mínimo. "Es lo que sé, me he quedado un poco en shock, me puse a llorar", confesó Joaquín Torres sobre el momento en el que Ángel, su médico, le dijo que tenía que quedarse en el hospital unos días más.
"Esto viene de los cultivos que pasaron hace 15 días y que se han manifestado hoy", indicó el arquitecto explicando a Sonsoles Ónega y a la audiencia de dónde ha venido esa infección. "No sé la trascendencia ni la repercusión que va a tener esto, porque no se me podía operar con infección de huesos, y es lo que tengo", añadió. Según contó, la infección se habría manifestado en las placas que le pusieron en la cadera cuatro meses atrás.
Joaquín Torres lleva mucho tiempo en el hospital y asegura que está agotado de estar allí, ya que en cuatro meses ha pasado por cuatro operaciones. "La cicatriz es de 30 centímetros. Tengo toda la parte de la cadera con más de treinta puntos y estoy agotado. Mi organismo no puede más", indicó el arquitecto, que está cansado de la situación y desea salir cuanto antes, pero va a seguir los consejos de sus médicos.