La colaboradora está cansada de que Jesulín de Ubrique no quiera ver a su hija y que cuente mentiras a otras personas.
Parecía que las aguas se habían calmado de un tiempo a esta parte en lo que respecta a la relación entre Andrea Janeiro y su padre Jesulín de Ubrique. La joven decidió poner tierra de por medio al cumplir los 18 años, así como pedir respeto por su privacidad ya que quiere ser una persona anónima. La primera en cumplir esto a rajatabla ha sido su madre, Belén Esteban.
Sin embargo, el hecho de que Jesús Janeiro vuelva a los ruedos y sobrevuele la idea de que quiere que Andrea Janeiro esté en su vuelta en Cuenca, ha hecho que vuelva a la palestra la relación con su hija. Belén Esteban está cansada de lo que se comenta y responde tajante: "Lo que no voy a permitir son las mentiras. Cada uno sabemos en la vida lo que hemos hecho. Él se tiene que creer lo que él va contando por ahí pero los que le rodean, que yo no tengo relación con ninguno, desde hace unos años para atrás se fue la comunicación; lo que él cuenta es mentira". Una vez más, la colaboradora hizo alusión al derecho a la privacidad que pidió su hija Andrea Janeiro y a las 'no visitas' de su padre cuando viene a Madrid: "Cuando a mí lo que más quiero en mi vida me dijo 'de mí nada', lo hice. Cuando un padre quiere ver a su hija y su madre no le deja, puede acudir a la Guardia Civil y verla cuando a él le dé la gana. No hay que echarle la culpa a nadie".
Información de primera mano
Gustavo González comentaba en 'Sálvame' que tenía información de alguien muy cercano a Jesulín de Ubrique y aseguraba lo siguiente: "Según él, no ha sido correspondido y son otras personas las que deberían darle respeto y cariño. Justifica la falta de trato porque él piensa que no ha sentido ese cariño durante mucho tiempo. Según Jesús justifica que haya tirado la toalla. Seguirá dando lo que tiene que dar económicamente pero no va a dar nada más".