Javier Ungría ha reflexionado en 'Supervivientes 2024' sobre los problemas que ha dejado en España. Sus bajones de ánimos cada vez son más evidentes después de dos meses en la isla, y ahora ha hablado de su situación personal al haber sido nominado para abandonar la isla de Honduras. Es más, tan desganado está que ha dejado claro que no le importaría volver a casa por todos los frentes que tiene abiertos.
Ha hablado con su compañero Rubén Torres sobre cómo ha afrontado esta nominación, diciendo: "Bien, un poco agobiado. Llevo unos días con la cabeza en Madrid. No es por la nominación, es un tema personal ", ha empezado diciendo. Aunque no ha entrado en demasiados detalles, se intuye que se refiere a la situación que vive con su ex Elena Tablada por la custodia de su hija. "Pienso que hay bastantes cosas que están pasando en mi vida allí que si estoy yo es mejor", ha comentado.
Pero mientras piensa en un posible regreso, ha querido dejar claro que no se rinde: "Yo estoy bien y contento con estar aquí pero es verdad que el tiempo pasa. Han pasado 10 semanas y me preocupa pensar ciertas cosas que requieren de mi presencia, igual no", ha comentado. Por otro lado, su compañero le ha dicho que si no tiene noticias del exterior no habrá pasado nada grave en su ausencia, así que expresó que no se preocupara.
"Se están cociendo cosas para mi vida y para el futuro de mi hija", añadía, haciendo alusión a la niña fruto de su relación con la diseñadora y dejando al descubierto cuál es su principal preocupación. " En el fondo no me vendría mal. Llevo unos días así porque lo estoy pensando demasiado", decía sobre una posible expulsión, pero de momento tendrá que esperar para ver qué pasa con su futuro en el programa.
El motivo del bajón de Ungría
De sus problemas tampoco ha podido olvidarse mucho en el concurso porque se pudo saber a través de Elena Tablada que Javier Ungría tuvo que hacer un receso en el programa por el juicio por la custodia de su hija. Al parecer, él salió durante unas horas del programa para asistir a través de videoconferencia al juicio que se celebró en Madrid, pero lo que pasó en ese juicio no ha trascendido. "Confío en Dios y en Universo. A mí no me tiene que favorecer nada, tiene que favorecer a mi hija", decía Elena Tablada a su salida de los juzgados. Quizás este sea uno de los motivos por los que Ungría se encuentra de bajón.