Oriana Marzoli e Iván González llegaron a 'La Casa Fuerte' confesando que habían tenido algo más que palabras durante las primeras fases de la desescalada pero sin hablar abiertamente de que habían empezado una relación. Desde la primera noche del reality han tenido sus más y sus menos pero, desde luego, tan romántica como la última reconciliación tras una bronca no ha sido ninguna.
La venezolana se enfadó muchísina porque no le gusta cómo contesta su compañero cuando le preguntan sobre los sentimientos que tiene hacia ella. Asegura que le "desquicia" que toma una actitud muy de "chulito" y Labrador y Fani le han animado a que, en lugar de tanto cabreo, fuera a hablar con él. Lo que ella no esperaba era la reacción que tuvo Iván González ante su planteamiento.
Oriana decidió seguir ese consejo y fue a hablar con 'su chico', encontrándose con que, en un primer momento, optó por no hablar con ella. No obstante, después de recapacitar y con la cosa mucho más calmada, González decidió sincerarse y contarle todo lo que le pasa por la cabeza, y por el corazón.
Iván a Oriana: "Aquí no sé estar sin ti"
Eso sí, antes de todo ello acudió al confesionario para contar que tiene al lado a un Oriana que no reconoce: " No sé qué le está pasando pero yo me estoy empezando a cansar un poco. Yo intento no discutir y no llevarlo al extremo, pero es bastante complicado", decía mientras Marzoli seguía enfadada y tratando de determinar la razón por la que él no quería hablar con ella: " ¿Puedes hablar las cosas y luego si quieres me dejas? Se va, huye. Es o que no le importa una mierda o que no sabe dialogar".
Pero ese diálogo terminó llegando y la cosa acabó de forma totalmente inesperada puesto que Oriana consideraba que su relación se había terminado: "Aquí no sé estar sin ti. A mí cuando Sonsoles me dice '¿tú la quieres?' no me sale decir ahí delante de todo el mundo... Reconozco que ayer me equivoqué. No quiero hacerte sufrir, lo único que quiero ahora en este momento es hacerte la persona más feliz, es lo único que me interesa Te quiero de verdad y te acepto como eres. He decidido quererte así". Conversación que acabó con unos arrumacos: "Eres la persona con la que quiero empezar una nueva vida".