En el último episodio Rodrigo se ha propuesto que la ganadora de 'GH 17' cambie sus hábitos y se convierta en una persona más saludable. Sin embargo, ella no está muy por la labor y el despertar que ha tenido no ha sido demasiado bueno. Lo que podría ser un acto muy romántico se ha convertido en una tortura para Bea. Rodri ha decidido llevarle el desayuno a la cama, pero no uno normal, sino uno fitness.
Muesli con yogur y un vaso de agua a lo que Bea ha respondido con una tremenda cara de asco. De muy mal genio ha probado una cucharadita pero nada más y el exconcursante ha insistido a su chica para que fueran a hacer deporte de buena mañana. Se han marchado a un parque cerca de la casa del chico y Bea ha hecho un poco de ejercicio, todo entre muchas risas y con un toque de humor muy divertido.
La revancha con la suegra
Entre enfados y tonterías se ve que ambos se entienden a la perfección y que tienen una relación de lo más divertida. Rodri intenta que Bea hable en inglés o francés aunque los resultados son bastante nefastos y son muy naturales en su docu-reality, mostrando momentos tan personales como un eructo de Bea, si, un eructo. Ambos viven su amor a su manera y todos los fans pueden disfrutar de ellos.