La cantante y su mujer declararon por el robo contando cómo se sintieron y cómo vivieron el asalto a su casa.
La investigación por el robo con violencia en la casa de María del Monte e Inmaculada Casal sigue su curso. Tras la celebración del juicio, ha sido el programa '¡De viernes!' el encargado de hacer públicas las declaraciones de ambas, en las que narran cómo vivieron el asalto a su casa y la dureza que supone para ellas el recordar las emociones que experimentaron durante ese momento de incertidumbre por el que está acusado el sobrino de la cantante, Antonio Tejado.
Durante su declaración, Inmaculada Casal cuenta que hubo indicios que le hicieron sospechar de que las personas encargadas del robo conocían la casa y a ellas mismas: "Ni nos mataron ni nos hirieron con heridas de sangre, pero yo noté ensañamiento, sobre todo con mi hija. Entre María del Monte y yo, con ella vi un trato un poquito más especial. Los privilegios de la fama o yo qué sé", contó en su declaración.Así, la mujer de María del Monte afirmó que eran conscientes de los pasos que tenían que seguir y de la forma de la caja fuerte: "La casa no la manipularon, no registraron más, sabían que la puerta no funcionaba, sabían la distribución de la casa perfectamente, sabían las personas que estábamos allí dentro durmiendo perfectamente. Y sabían dónde tenían que ir y cómo era la caja fuerte", expresó Inmaculada Casal. De este modo, esto le hizo sospechar que quienes entraron les conocían y conocían la casa.
La situación para ella tuvo mucho impacto, llegando a temer por su vida y por la de su propia hija: "Veo que cogen a mi hija y corriendo me coge de los dos brazos. Me apretó y me hizo daño. Me lleva, me tumba en la cama boca abajo y me atan con el cable de mi iPhone... Me pone la almohada encima de la cabeza y me dice 'te quedas ahí'", contó indicando que cuando le quitó las manos de encima pudo respirar tranquilamente.Llenas de miedo
María del Monte también declaró en el juicio, indicando cómo se sintió y no pudiendo evitar la emoción al recordarlo: "Me sentaron en la cama. Un pánico, una taquicardia, se me salía el corazón por la boca. Le pregunto a una de esas personas que si puedo beber agua porque no me encuentro bien y me dice que sí y me la da", expresó la cantante contando también como le amenazaron para que abriera la caja fuerte.