'Cuéntame cómo pasó' regresa a la pequeña pantalla, y lo hace en su temporada número catorce. Para celebrar este acontecimiento se organizó un estreno por todo lo alto los cines Capitol de la Gran Vía de Madrid, donde se dieron cita muchos de los protagonistas de la serie.
No faltaron Juan Echanove, Ana Arias, que lució embarazo, Lluvia Rojo, Santi Crespo, Silvia Espigado, Elena Rivera, Sergio Pazos, Nacho Aldeguer, Lidia Otón, Ruth Díaz, Amparo Pacheco, Nazaret Aracil y otros muchos de los actores que siguen o que han pasado por la serie a lo largo de sus más de 11 años de existencia.
El 23-F de los Alcántara
De la mano de los protagonistas de 'Cuéntame cómo pasó', los Alcántara, se revive aquella fecha histórica que pudo cambiar el rumbo político de España. Serán largas horas de espera, miedo e incertidumbre pegados a la radio para no perder detalle y con el teléfono siempre en la mano para asegurarse de que los suyos están bien.
Antonio y Mercedes intentando localizar a sus hijos que no saben donde están. Carlos en el bar Fly ajeno a la situación que se vive. Inés en un bolo en Valencia y Toni, como periodista, viviendo muy de cerca el golpe. Por su parte, Miguel decidirá no acobardarse y sacará su vena más revolucionaria.
Así se rodó 'Larga noche de transistores y teléfonos'
De 90 minutos de duración, 'Larga noche de transistores y teléfonos' es uno de los capítulos más cinematográficos de 'Cuéntame cómo pasó' por su producción y narrativa. El equipo de la serie rodó este capítulo, para el que precisó más de un centenar de figurantes, a lo largo de 11 días y en los lugares en los que los españoles concentraron su atención aquella noche del 23-F.
Escenarios naturales de Madrid y provincia como el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro, el Cuartel de El Goloso, el Teatro Diéguez de Colmenar de Oreja, los Paseos Arbolados de los Sotos Históricos de Aranjuez, los exteriores del Congreso de los Diputados y el Hotel Palace.
El rodaje en el exterior del Hotel Palace se realizó de noche y fue necesario cortar de manera intermitente, el tráfico de la Carrera de San Jerónimo, así como ocultar señales de tráfico y otros elementos urbanos actuales. Una noche de principios de junio en la que actores y figurantes tuvieron que vestir ropa de abrigo, adecuada para las temperaturas de aquel mes de febrero de 1981.