El exportero comenzará una nueva etapa en la cadena pública, recordando a lo que hizo su mujer 12 años atrás.
Un año más RTVE ha presentado sus nuevos espacios y programas renovados para la nueva temporada y el lugar elegido han sido los Cines Callao de Madrid, donde se han dado cita muchos rostros conocidos, entre los que se encontraba Iker Casillas, pero no ha sido por algo casual, sino porque él se ha convertido en uno de los nuevos fichajes de la televisión pública.
El exportero ha sido visto a su llegada para después, ya en el interior de los cines, desvelar el motivo de su presencia. La sección de Deportes del ente público cubrirá el Mundial de Catar y ha sido Arsenio Cañadas, el responsable del área, el que ha hecho saber lo siguiente: "La cadena quiere recuperar el espÃritu de 'La Roja' de 2010, campeona del Mundial", asà que quién mejor que Iker Casillas, que se ha convertido en uno de los comentaristas de la casa. Después ha sido el protagonista de este nuevo fichaje -como antaño en el terreno de juego-, el que se ha mostrado emocionado por comenzar una nueva etapa en su vida, diciendo: "Estoy agradecido por esta oportunidad, por este aprendizaje. Un placer estar comentando partidos con TVE. Seguro que España va a hacer un gran papel y seguro que sumamos la segunda estrella".
Eso sÃ, esta no es su primera experiencia como comentarista, ya que ha estado haciendo lo propio en Movistar Plus+. Será a partir del 20 de noviembre cuando RTVE comenzará a emitir los 19 encuentros, 20 si España llega a disputar el tercer y cuarto puesto, de la gran competición internacional. Siguiendo los pasos de su exmujer
Resulta que el exguardameta llevará a cabo una función que recuerda mucho a la que desempeñó su exmujer 12 años atrás, cuando él se alzó con la victoria en el Mundial de Sudáfrica 2010, protagonizando ambos un increÃble beso en directo cuando ella le tuvo que entrevistas para cumplir con su trabajo. Lo que menos se esperaba es que en aquella conexión en la que debÃan comportarse como profesionales, dejando a un lado su vÃnculo personal, él no se iba a cortar y la besarÃa sin pensárselo dos veces.