MEA CULPA

Gustavo González se disculpa con María Patiño tras las polémicas imágenes de Kiko Rivera: "Me asquea vernos"

También Pablo Calvo se ha disculpado con la colaboradora. Ambos aseguran que ya no son machistas.

BEKIA 05 Febrero 2021 en Bekia

La filtración de unas imágenes de Kiko Rivera cuando apenas tenía 18 años hablando maravillas de su familia Pantoja y cargando contra los Rivera se han cobrado otras dos víctimas: Gustavo González y Pablo Calvo. Ambos fotógrafos, quienes realizaron la entrevista, fueron partícipes del DJ y sus comentarios despectivos hacia María Patiño, de quien llegaban a hablar sobre las relaciones sexuales que habría mantenido con un conocido hombre. Tras esto, la colaboradora de 'Sálvame' ha tenido un cara a cara con ambos para recibir un perdón público.

Gustavo González le confesó a su compañera que "en ese momento esas imágenes no se vieron en 'DEC' porque yo las censuré", reconociendo que "no creíamos que fueran buenas ni para Kiko ni para ti", pero que habían visto ahora la luz porque "cuando se anuncia 'La herencia envenenada' a mí me piden los brutos y no ni me acordaba de que había esta parte". No obstante, el colaborador asegura que "me da vergüenza y me asquea vernos en plan machirulos", reconociendo que "tenía que haber estado más contundente".

En cambio, Gema López identifica en ese vídeo de hace tanto tiempo al Gustavo González que siempre ha conocido: "Por detrás es muy chistoso, con bromas sobre determinados asuntos... yo lo que veo es que él hace un comentario desafortunado y lo demás os reís porque lo veis normal. Es un comportamiento generalizado", y asegura que la parte que nunca vio la luz públicamente todavía es peor: "Cuando habláis de determinados temas os descojonáis. Es que hay determinados temas que a los hombres os hacen gracia".

Gustavo: "Espero haber evolucionado porque no me considero machista"

Consciente de ello, Gustavo González se ampara en el paso del tiempo y confiesa que, hoy día, ya no es ese que se escucha en las imágenes de la discordia: "Con el paso de los años, yo no me considero machista, pero partes de mi carácter tienen esa reminiscencia", y añade: "En esas imágenes tenía 37 años y por aquel entonces hacia chistes sobre condiciones sexuales, sobre el físico... ya no los hago, espero haber evolucionado porque no me considero machista".

Pero estas palabras no parecían ser suficiente excusa para justificar lo que María Patiño había oído sobre sí misma, asegurando que si eso en su momento no vio la luz no fue por ella, fue por Kiko Rivera. "El hecho de que tú lo hubieses censurado no significa que a mí no me estés ocultado nada. Yo no comento ningún delito, no hago ningún comentario desafortunado...", y deja claro que los que salen bien prados son "Kiko, a ti y a Pablo, que quedabais como el culo".

Pablo: "Esa no es mi forma de actuar, no soy un machista"

Tras esto, a Gustavo González solo se quedó entonar el mea culpa y el perdón: "Te pido disculpas porque no paré en su momento lo que tenía que haber parado". Tras las palabras del ahora colaborador de 'Sálvame' llegó el turno de Pablo Calvo, el otro fotógrafo que se escucha en el vídeo. Este también intentó justificar sus actos apelando a la relación que tenía y tiene con la damnificada: "Me conoces desde hace mucho tiempo y sabes que esta no es mi forma de actuar, que no soy un machista", e incluso se atrevía a reprocharle a Patiño sus palabras del día anterior: "Creo que tus palabras ayer se excedieron un poco".

Tras esto, reconocía también su perdón: "Aún así te tengo que pedir disculpas, no supe parar a tiempo a Kiko", aunque de nuevo volvía a poner en el punto de mira a la colaboradora intentando hacer ver que ella también había hecho cosas del mismo calibre: "Tú también trabajaste en la calle y sabes que se le ríen las gracias al personaje y tú también lo hiciste". Unos reproches que no gustaron nada a María Patiño que respondía con contundencia: "Si tu perdón va basado en que yo también me he reído a otras personas, entonces tú no me pidas disculpas y a lo mejor la que tiene que hacerlo so yo". Tras esto, y para poner fin de una vez por todas a la polémica, Gustavo González rompía en el plató con un martillo la cinta original con las imágenes para que nunca nadie pudiese saber qué se dijo de María Patiño por aquel entonces.

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