El colaborador de 'Sálvame' confesó durante el programa que su compañera le había pedido dinero a través de Mila Ximénez.
Las deudas que arrastra Chelo García Cortés desde hace meses dejaron de ser un secreto. Según reveló la revista Lecturas, la colaboradora estaba arrastrando una deuda de más de 1,4 millones de euros. Una cantidad de dinero que sus propios compañeros han indicado que se debe a que García Cortés le ha gustado vivir siempre por encima de sus posibilidades y malgastar todo lo que ha podido. Una cifra tan alta que ha causado que la periodista haya visto su sueldo embargado al 70%.
Pero las informaciones sobre estas deudas no dejan de cesar. Lo último que se ha conocido en 'Sálvame' el miércoles 12 de junio a través de Kiko Hernández, que ha confesado que su compañera le pidió dinero, pero no solamente a él, también a amigos del propio colaborador que este le había presentado: "Chelo me hizo pasar vergüenza porque le pidió muchos miles de euros a una amiga que le presenté".
Chelo García Cortés habría pedido a Hernández la gran suma de 12.000 euros. Esta petición no le llegó a él directamente de boca de la periodista, sino que usó a Mila Ximénez para que mediara entre los dos. Finalmente, el colaborador afirma que no llegó a prestarle esa cantidad de dinero: "Yo le hice varios favores que cuando vuelva si quiere que entre y si no, pues nada", contó el colaborador.
Chelo también quiso quitarle un trabajo
El préstamo que al final no se llevó a cabo no ha sido lo único que ha revelado Kiko Hernández en 'Sálvame'. Además de eso, ha contado cómo en una ocasión García Cortés quiso arrebatarle uno de los trabajos que él desempeñaba los fines de semana: "Chelo fue a un evento en el que yo trabajaba y se portó tan mal que intentó quedarse con mi trabajo. Ella quería casar a la gente y que yo me quedara en mi casa", confesó el colaborador.