El pasado miércoles 16 de febrero Rocío Carrasco concedía una entrevista en el plató de 'El programa de Ana Rosa', programa en el que colabora su hija Rocío Flores, para responder a todo lo que habían dicho familiares suyos tras su última aparición en 'Montealto'. Entre ellas, a su hermana Gloria Camila, que pocos días antes le había pedido desde 'Ya son las ocho' que le cuente personalmente esa realidad de la familia Ortega Mohedano que tanto daño le podía causar.
En cambio, Rocíito ha dejado claro que esa llamada no se va a producir: " Hay que darle mucho tiempo [para que se produzca esa conversación o acercamiento]. Yo me tengo que recomponer (...) tengo que seguir trabajando en mí (...) he empezado a vivir y he dejado de malvivir hace seis meses y necesito unos tiempos (...) y una recuperación emocional (...) Yo estoy ahora fuerte, mucho mejor, pero yo no estoy recuperada al 100% y me queda camino que recorrer ", reconocía.
"Me ha quedado claro que si yo la llamase no me cogería"
Horas más tarde, de nuevo la también hija de Ortega Cano le respondía a través de las cámaras. Gloria Camila, pese a las palabras de su hermana, reconocía que hizo las cosas como las hizo porque "llevo sin hablar con ella muchísimos años", por lo que no veía lógico levantar el teléfono y hacer como si nada para pedirle esos papeles. "No vi ese momento así, por eso me pongo en contacto con los abogados y pregunto que de qué manera podemos hacerlo para que esos documentos los vea yo antes de que salga todo públicamente".
Aunque también reconoce que, bien cómo fue la respuesta de su hermana ante la justicia, no cree que fuese a ser tan colaborativa de habérselos pedido personalmente: " Si yo te hubiese llamado por teléfono te habrías negado igualmente, porque ella lo que achaca en la primera respuesta es que ella es la heredera universal y que le pertenece solamente y exclusivamente a ella", algo que cree que también haría a título personal teniendo en cuenta que no tienen ningún tipo de relación entre ellas.
Una relación que tampoco va a recuperarse en un corto plazo por lo que dijo en esta entrevista, dando Gloria Camila por zanjada cualquier posibilidad de ponerse en contacto: " ¿La llamaría? Pues posiblemente, pero después de ver lo de 'Ana Rosa' no creo que llame, ya no existe la llamada de 'voy a llamar' o 'voy a esperar a que me llame'", aseguraba: " Me ha quedado claro que si yo la llamase no me cogería y que ella no me va a llamar porque no está preparada ". Aunque cuestionaba también las palabras de su hermana por lo que anteriormente había dicho en 'Montealto': "Al final dice que lo de la llama 'no estoy bien emocionalmente para hablar con nadie ni para esa llamada ni nada', pero el viernes sí que dijo 'aquí os espero para que vengáis uno por uno'. Entonces para recibir a los malos sí que tiene tiempo y puedo, pero para recibir supuestamente a los buenos no ", le espetaba.
"El daño psicológico que le ha hecho todo esto a Rocío Flores no se va a recuperar"
De lo que también ha tenido que pronunciarse Gloria Camila es sobre la petición de su hermana de que se deje de hablar en los diferentes programas sobre la agresión que sufrió a manos de su hija Rocío Flores cuando esta era menor y por la que fue condenada en su momento: "Para mí no es plato de buen gusto porque de esto se sigue hablando, de ese episodio, y al final eso lo único que genera es dolor en ella, en mí y en todo. A ella le supone dolor y a mí a volver a revivir lo mismo ". Unas palabras que, en cambio, no convencían a su hermana, quien aseguró que, si no quería que esto pasase, igual tendría que habérselo callado en su momento.
" Apartarla ahora, no tiene ningún sentido. El daño ya está hecho. La imagen que le han dejado a Rocío la tiene ya, aunque ahora la dejemos apartada. La imagen ya está manchada y la imagen que tiene la gente de ella es otra", aseguraba. Porque, aunque ahora Rocío Carrasco no quiera ser cómplice del sufrimiento de su hija, muchos han recibido esas palabras a través de su serie documental y ejercen esa violencia contar ella igualmente: " Rocío sigue sufriendo todos los días, ya no solo por la tele, sino por el acoso, insultos, amenazas todos los días. Y el daño psicológico que le ha causado todo esto no se va a recuperar".