Todo comenzó con Anabel Pantoja pegando un cartel promocional suyo encima del de Gianmarco en el baño. Cuando el italiano lo vio le pidió explicaciones a sus compañeros, que seguían tomándoselo a risa, y que cuando vieron un bastoncillo para los oídos usado en el suelo aprovecharon para culpabilizar al italiano para seguir con la broma.
"A vosotros os gusta hacerme enfadar, que pierda un poquito la paciencia, intentáis que la gente lo vea y ya está", dijo el italiano, que se notaba que no le estaba haciendo ninguna gracia. "Victimismo conmigo no. Se ha caído el cartel y el cartel lo ha puesto ella (Anabel)", dijo el ex de Gloria Camila, que añadió que pensaba que el italiano se ponía de esa manera para ganar puntos con la audiencia: "Se nota que está aquí la final y hay que hacer méritos".
Gianmarco, con estas palabras del que hasta ese momento era su amigo, se quedó muy desconcertado y le dijo que él siempre había sido el mismo y que no había cambiado, pero Jiménez no se creía nada: "Aquí estamos todos de buen rollo, haces el papelón", le dijo el concursante, a lo que el italiano no pudo evitar contestarle: "El papelón lo haces tú. Hasta ahora siempre he sido real, si tú no lo eres, el problema es tuyo", dijo muy enfadado.
Gianmarco rompe a llorar
El italiano se encontraba totalmente superado por la situación, tanto fue así que decidió irse a la cama a llorar desesperadamente. Cuando la sobrina de Isabel Pantoja lo vio decidió acudir a su encuentro para tranquilizarle, pero el italiano parecía no entrar a razones: "Yo me he puesto a llorar porque no me esperaba sus palabras después de todo lo que yo he hecho por él", le explicaba a la concursante.
"Yo no le he dicho nunca al público que me siento atacado, yo le he dicho que sus bromas (las de Kiko) a mí me afectan, por cosas que he pasado yo y porque yo soy mas sensible", aseguró Onestini, haciendo referencia a que Jiménez bromeaba mucho con su físico y que eso él no lo llevaba bien porque en el colegio de pequeño sufrió bullying por parte de sus compañeros precisamente porque era un niño con sobrepeso y que las bromas del novio de Suescun, le hacían recordar a los duros momentos que atravesó en su infancia.