Gerard Piqué ha acudido al plató de 'El Hormiguero' para hablar con Pablo Motos, y lo ha hecho acompañado de David Ferrer, extenista español, para hablar de un asunto muy distinto del fútbol, sino que esta vez está muy vinculado al tenis. La nueva Copa David llegará a la Caja Mágica en noviembre de 2019 y ambos han acudido a promocionarla.
Más allá de todo lo que tenga que ver con este nuevo proyecto en el que él está a la cabeza, ha hablado de cómo se siente cuando se ve envuelto en numerosas polémicas por sus comentarios, y parece que es algo a lo que le ha cogido el gustillo. "Normalmente es algo premeditado. Lo hago para pasármelo bien. Me descojono y me lo paso bien porque el mundo del fútbol es un espectáculo. Luego nos reímos en el vestuario", ha dicho el central del Barça. Y ha querido seguir diciendo: En el fútbol es todo una mentira y una farsa. Es todo mucho más fácil de lo que la gente cree. Los jugadores nos llevamos de maravilla. El ambiente es genial. Cuando nos metemos en líos es porque queremos un poco de salsa".
Con el paso de los años, como él mismo ha matizado, las críticas le han ido afectando menos, y se ha ido haciendo a ellas, diciendo: "Ahora pasas un poco de las críticas. Claro que te afectan, pero las relativizas. El fútbol es resultadista. Tener a la gente en contra me motiva más porque cuanto mejor juegas, les jodes más a ellos. Los años en los que me silbaban en la selección fueron mis mejores años allí porque me motivaba más". Lo cierto es que el futbolista parece que canaliza muy bien todo lo negativo y lo utiliza como energía, porque ha añadido: " Al contrario que al resto de la gente, a mí que me silben, que me abucheen no me baja los ánimos, sino que me los sube. La última etapa en la Selección fue la mejor que tuve porque fue en la que más me silbaron".
Pasiones y ejemplos
Y entre broma y broma, ha confesado cuál es uno de sus vicios. Sin ir más lejos ha dicho que algo que le vuelve realmente loco es la Nutella, es decir, la crema de chocolate y avellanas. Es más, ha asegurado que podría comerse medio bote cada día, aunque también ha dejado claro que los deportistas como él tienen que llevar una dieta estricta.
Lejos de su visita al programa de Antena 3, el futbolista había regalado con anterioridad unas imágenes muy especiales en sus redes sociales de sus dos hijos, Sasha y Milan. El deportista ha salido al campo a pasear con sus pequeños y ha aprovechado para cuidar el medio ambiente limpiando toda la zona de plásticos, lanzando dos mensajes ecologistas y más teniendo en cuenta la enorme cantidad de seguidores que tiene en las redes.