Alejandro Albalá se dio a conocer por su relación sentimental con Isa Pantoja. Se convirtió desde entonces en un habitual de los platós, en concursante de realities y por tanto en una cara conocida que supo rentabilizar aquellos años de fama. A aquello ayudó también su relación con Sofía Suescun, que le dio un impulso para seguir facturando.
Alejandro Albalá en la foto oficial de 'Supervivientes 2021'Y entonces ocurrió lo que suele pasar con los personajes de Mediaset que no logran hacerse con un puesto como colaboradores o que no logran interesar tanto por su vida privada o profesional. Alejandro Albalá cayó en cierto modo en el olvido tras su paso por 'Supervivientes 2021'. Eso no quiere decir que le haya ido mal, sino todo lo contrario. Ha tenido cabeza y ha sabido invertir lo que ganó.
Un negocio rentable lejos de la televisión
El de Santander montó un estanco en el madrileño barrio de Carabanchel, convirtiéndose así en empresario. Albalá se encarga personalmente del establecimiento por las mañanas, donde permanece entre las 09:00 y las 15:00 horas. Por su parte también atiende los pedidos, repone o limpia. Tiene además dos trabajadoras a su cargo, por lo que además genera empleo.
Alejandro Albalá en la gala final de 'GH DÚO'De todo ello habló durante su paso por el 'Deluxe', donde reconoció que lo había montado con el dinero que ganó en la televisión. " Hay que invertir entre 300.000 y un millón de euros. Me llamaban vago pero todo tiene su tiempo. En el estanco me encargo de todo", comentó Albalá, por lo que ha dejado claro que ganó mucho dinero durante el tiempo en el que trabajó en la televisión, a lo que habría que sumarle ingresos por bolos.
Más hermético se mostró en un primer momento cuando se le preguntó por cuánto ganaba al mes. "Estoy contento", se apresuró a decir. María Patiño, encargada de la entrevista, preguntó si serían más de 3000 euros, ante lo que contestó: "Bastante más que menos", por lo que parece que sí ingresa mucho. Eso sí, se entiende que eso es lo que obtiene de beneficio para él descontados todos los gastos que genera el negocio. Si es así, está claro que tomó la decisión correcta.
