El cambio de poder en Club GH dio un vuelco a las nominaciones de la anterior gala de 'Gran Hermano 17'. A pesar de eso, Bárbara no pudo evitar volver a enfrentarse a la decisión de la audiencia el pasado 20 de octubre, aunque sí consiguió cambiar de contrincantes. Y es que gracias a sus privilegios en el club, con la ayuda de Adara y Bea, sacó a la palestra a su mayor enemigo: Fernando, pero el gaditano no fue el único en estrenarse como nominado.
La otra concursante que llegó a la gala 7 en la zona de peligro fue Noelia, quien se sorprendió mucho al salir nominada y no ha pasado una buena semana. Sin embargo, el nombre del futuro expulsado no estaba demasiado claro para ellos teniendo en cuenta todas las veces consecutivas que se ha salvado Bárbara, las múltiples tramas que tiene Fer en la casa o la bondad y, en cierto modo, inadvertencia de Noelia.
Y aunque en la casa de Guadalix de la Sierra no lo tuvieran claro, parece que la audiencia lo tenía bastante decidido, ya que el pasado martes, en los porcentajes ciegos mostrados en 'GH: Límite 48 horas', el concursante más votado para salir aglutinaba el 59,7 % de los votos mientras que los otros dos se repartían el 24,8% y el 15,5% restantes. Unos porcentajes que apenas se habían movido desde el debate del pasado domingo.
Pero antes de que Jorge Javier Vázquez desvelara el veredicto del público, algunos de los nominados tuvieron la oportunidad de deshacer nudos y hablar en privado de sus cuentas pendientes, tal y como otros compañeros habían tenido la oportunidad de hacer en el apartamento gracias a las decisiones del 'concursante 17'. Así, los primeros en intentar acercar posturas fueron Bárbara y Fernando, a continuación fue el turno de Clara con la vloggera y, después, con menor éxito, Adara y Clara hablaron de sus diferencias.
Tras estas conversaciones, el trío protagonista del mayor enfrentamiento de la casa tuvo su momento: Adara y Miguel fueron los primeros en hablar y, sorprendentemente, entenderse. Después eso, Pol se reunió con Miguel, que le contó que su novia y él querían empezar de cero. Las protagonistas del sexto cara a cara de la noche fueron Rebeca y Meritxell enfrentadas durante la última semana por la atención de Alain. Después de estos encuentros en los que, en mayor o menor medida, todos sacaron algo bueno, llegó la hora de la expulsión.
Fernando pierde su temido pulso ante la audiencia
"La audiencia ha decidido que debe abandonar la casa... ¡Fernando! ", anunció Jorge Javier Vázquez ante un impasible Fer, que parecía conocer el resultado de antemano a diferencia de sus compañeras que muy sorprendidas y reconfortadas no paraban de llorar y gritar en la sala de expulsión, sobre todo la vloggera alicantina, que además de salvarse, le ganó la batalla a su enemigo.
Como era de esperar, la más afectada por la salida del gaditano fue Clara, que nada más ver cómo regresaban Bárbara y Noelia se encerró en el baño y sólo salió a instancias del Super, mientras que desde la sala de expulsión y entre lágrimas, Fer veía la reacción desconsolada de su gran amiga dentro de la casa. Todos fueron a darle ánimos, incluso Bárbara, que le dijo que Fernando no se había ido llorando.
"Claro que no se ha ido llorando, joder. Porque ya lo sabía... Es tu puta guerra, desde el principio. Y hasta que no has salido con él no has parado ", le reprochó le madrileña a la alicantina, que también estaba muy emocionada. "¿Y me culpas a mí? He venido a decirte que lo siento...", le respondió Bárbara a Clara, que afirmó estar "muy jodida".