"Es la gilipollez más grande que he escuchado desde que he nacido", así describió Cristina varias de las 'perlas' de Markus, un concursante que cree que "una aceituna engorda como tres croissants". De nuevo la misma respuesta: "Eso es una gilipollez como una casa".
Pero la decepción no quedó en las formas y en el trato de Markus con las demás pretendientas, sino que hizo a Cristina estar a punto de abandonar el programa: "Yo no puedo estar con gente fea", "lo vas haciendo disimuladamente, si tengo algún amigo que me parece feo, poco a poco, voy dejando de quedar con él".
Aún pasando una noche juntos y habiéndose ganado a la madre de Markus gracias a su desparpajo y poca vergüenza durante una excursión a Portugal, Cristina fue expulsada. Pero este 'amor de madre' no supera la adoración de Rosa por Juan, el pretendiente de su hijo Sandro. Lo quiere como " una de esas personas que no sabes porqué, pero desde el principio conectas con ellos. Es de las personas con quien más feeling he tenido". Sandro parece que dejó atrás los vínculos y con una expulsión directa explicó que "Juan para mí es importante pero lo es más Joss", "lo siento, así fue la despedida, un 'adiós' que despertó también la emoción de los demás pretendientes.
Dos expulsiones traumáticas
Dos de los momentos más tensos de la noche se vivieron gracias a la expulsada de Rafa 'el milloneti'. Delia, regaló varios capítulos propios de una clásica choni. Desató la ira y la vergüenza de MªLuisa -madre de Rafa- por su comportamiento ante una prueba en uno de los negocios de la familia.
Delia y Sara se enzarzaron en una pelea cuando tenían que intentar captar clientes con varios 'folletes' para que conseguir nuevos usuarios en uno de los aparcamientos del aeropuerto malagueño: "Aparta y vete a Parla. Me tienes hasta los huevos".
Tras el incidente y una 'seria' meditación, Rafa expulsó a una Delia despechada, montó otro berrinche como en el programa anterior y dedicó unos insultos y descalificaciones como despedida: "Eres un mongolo, un pánfilo, un pelele y un idiota. No sé pero no puedo hablar de él...no puedo...". Acto seguido: "Es un mentiroso y un falso, es que me da asco. Es que si pudiera le escupía en la cara".
El complejo del 'Hipo' según la mística
Además de los numeritos de Ana y Bea -pretendientas de Diego- que volvieron a protagonizar, Ana se defendió con una irónica y desafortunada expresión en pleno desayuno, una muestra más "de la poca clase" de la rusa según Estrella: "Quiero el vodka para untármelo por el cuerpo y que Diego me lo lama". Pero esto no queda aquí, el cacereño cinéfilo vivió otro de los momentos clave cuando Yasmina le preguntó a Diego: "¿Qué piensas de la bisexualidad?", una montaña rusa de emociones que ha llevado al extremeño a decantarse por no expulsar a nadie: "quiero conocerlas un poco más".
David y su madre vidente han llegado a una decisión y el madrileño treintañero sin experiencia en relaciones ha expulsado a Oxana con una despedida un tanto crítica: "Estos días parecía que no estabas, entonces mejor que no estés". "Un momento para sentirlo y vivirlo como he hecho yo hoy", así describió Rosa la emoción del momento.
Diagnóstico precoz
Este cuarto programa ha sido más de emociones, discusiones y despedidas. Situaciones más íntimas como el debate entre David y Noelia 'la mística', un momento donde la pretendienta regaló una de las pocas 'perlitas' del programa.
Ante la explicación de David al porqué de pequeño su madre le 'daba picos en boca', la joven le respondió con un diagnóstico fulminante: "eso es complejo de Dipo. Sí, complejo de Hipo".