Y tanto que lo es. La propia Ana María Aldón se enteraba en directo de que su todavía marido se estaba reuniendo, mientras ella estaba en plató, con sus dos hijos aprovechando una salida de José Fernando del centro en el que se encuentra internado. "No me ha invitado", reconocía la diseñadora. Pero es que, según ha asegurado Ángela Portero en 'Ya es mediodía', Ortega Cano tampoco parecía tenía tener constancia ni de dónde estaba su mujer en ese preciso instante: "Él no sabía que esa entrevista la iba a hacer ni el contenido ni lo que iba a decir. Es otro palo tremendo para él".
Un hecho que no haría más que evidencia ese importante distanciamiento entre ellos que, lejos de ser un bache, podría ser la ruptura definitiva: "Él dijo al principio que le iba dar un tiempo a Ana María para que se recuperara y esa conversación que se iba producir se aplazó, aunque esperaba que ocurriera cuando ella estuviera algo mejor para tenerla", reconoce la periodista. En cambio, Ana María Aldón acudió antes al plató a aclarar los rumores sobre su vida que a hablar con su marido.
Ana María Aldón: "Me importa un pimiento"
Pero Ana María Aldón parece satisfecha con su paso por el programa del fin de semana y todo lo que ha dicho. Para ella su principal objetivo era aclarar todas las dudas en torno a la actual situación de su matrimonio y así fue. En cambio, muchos colaboradores siguieron apuntando que, pese a su negativa, el matrimonio está más roto que nunca y que la separación sería una realidad, siendo su entrevista toda una fuente de dudas: "¿Que yo he generado dudas? Dudas las generan los demás, yo aclaro", y espetaba un último: "Me importa un pimiento" sobre la opinión de los colaboradores.