El médico de esta edición de 'Gran Hermano' empieza a levantar las primeras sospechas entre sus compañeros. Su paso por el concurso ha sido, de momento, muy limpio y discreto ya que nunca ha salido de él crear una situación de conflicto dentro de la casa. No obstante, a pesar de lo anterior, parece que esta actitud de niño bueno está haciendo que el resto de sus compañeros quieran saber si realmente el concursante es así o si, por el contrario, es todo un papel.
Por su parte, el concursante al que ahora todos miran también ha estado observando a sus compañeros y en el confesionario ha dicho que ve a Aritz y Han como claros finalistas. De Raquel confesó que le parece un paripé su repentina nuevo amor dentro de la casa y también habló de su logro al conseguir la inmunidad y la satisfacción que sintió al ver la cara de fastidio de Suso. Además, ha confesado que su estrategia es quedarse quieto hasta que la audiencia expulse a Suso, Raquel y Amanda.
Enrique desconcierta a sus compañeros
Muti, último expulsado de esta edición, y Han han hablado sobre Enrique y no precisamente bien. El primero de ellos acusaba al concursante de falso y de ir comiéndole la oreja a todo aquel que le interesaba. Muti ha dejado claro que considera a Enrique un completo estratega. Por su parte, Han también ha criticado en el confesionario la actitud cambiante del médico y es que, cuando le interesa, este busca al concursante chino y cuando no, le hace caso omiso.