Para Chelo García Cortés se ha terminado la gran aventura por la que lleva luchando durante tanto tiempo. La concursante de 'Supervivientes 2019' ha sido la décima expulsada y ha retomado su vida en el exterior, comenzando por el emocionante reencuentro con su mujer Marta Roca. Chelo aparecía en el plató de lo más feliz y se abrazaba a su mujer con más ganas que nunca.
La superviviente no dejaba de llorar y de repetir 'te quiero' a su mujer sin soltarla. Ambas se besaron y demostraron que su amor sigue tan fuerte como siempre. "Es a quien más he echado de menos por encima de todo. Nos ha venido muy bien, nunca olvidaré el esfuerzo que ella ha hecho, porque ha estado siempre detrás. Que mi cuñado esté aquí hoy es muy importante". Durante su estancia en 'SV 2019' se ha cuestionado mucho que Marta Roca fuera su defensora, pero Chelo García Cortés estaba muy contenta.
"Yo estaba muy tranquila de que ella estuviera aquí, pero cuando una persona no está acostumbrada a la exposición que nosotros tenemos es más duro. Quién mejor que ella para defenderme", decía la concursante. Además, aseguraba que estaba muy feliz de su paso por el concurso: " Vuelvo muy orgullosa de lo que he hecho. Han sido cuatro años de espera, soy la más vacunada de todas las ediciones, y no quería defraudarme y he descubierto que puedo hacer muchas cosas. Yo quería llegar a la final, pero que me haya ganado Mahi me quito el sombrero, porque ha sido la persona que me ha facilitado la convivencia".
Hablando sobre sus compañeros
Chelo García Cortés no ha tenido problemas en hablar sobre los compañeros que han estado con ella en la isla: " Mónica Hoyos ha sido la más falsa conmigo. Respecto a todos, el que está haciendo un doble juego es Albert y Colate ha sido uno de los que me ha sorprendido desagradablemente". Además, protagonizó un encontronazo con Carlos Lozano, como en el comienzo del concurso en el que siempre estaban enfadados.
Respecto a Isabel Pantoja, todos los allí presentes le dijeron que había sido una sirviente, pero Chelo García Cortés se explicaba: " Isabel nos ha utilizado, pero yo a ella también. El encuentro fue lo más frío y duro para mí. Ahí me sentí ridícula, pero como la conozco, dije 'a ver qué pasa'. El tiempo que hemos estado juntas hemos estado bien. El día que me ve es como una patada en el estómago, pero cuando me voy creo que fue real. Ella es ahora la que tiene que mover ficha. No soy lacaya de nadie, he cuidado a Isabel y ella ha cuidado de mí".