En su visita a 'Fiesta', el cantante Raúl ha dejado ver el lado más divertido de Emma García. El cantante acudía al programa de los fines de semana para presentar su nuevo single, 'Me muero por tus besos'. Mientras estaba haciendo su actuación, decidió coger el micrófono en su mano y el trípode que lo sujetaba acabó en el suelo.
En ese momento, Emma García fue a recogerlo disimuladamente para evitar accidentes durante la actuación, pero decidió hacerlo de lo más animada, bailando. La cosa no quedaba ahí. Después de la actuación la presentadora se acercaba al cantante y empezaba a explicar al cantante por qué había tenido que interceder. "Que me estaban diciendo que se va a caer, y yo decía, 'pues si yo le veo divinamente, si está cantando muy bien' y ya cuando lo he visto, he venido", contaba.
Entre risas por lo sucedido, la presentadora le agradecía que hubiera venido. " Un placer tenerte aquí, es que sigues igual, con esa voz tan bonita, entregado, es un gustazo y con esa sonrisa", le piropeaba la presentadora. Pero Raúl no se quedaba atrás y contestaba: " Lo dice ella que siempre está igual de maravillosa y espectacular ".
Un dúo de lo más divertido
El cantante también admitía que había sido un placer estar allí y daba la enhorabuena a todo el equipo, a la vez que recalcaba que él estaba de gira. Es en ese momento de casi despedida, cuando Emma García ponía el micrófono en el trípode y lo sujetaba, aunque avisaba que no iba a cantar. Sin embargo, el público la animaba, así como Raúl. " No sé cantar ", confesaba ella.
Pero, finalmente, ella se animaba junto a Raúl a formar un dúo musical con el gran éxito de 'Sueño su boca', el tema que llevó al cantante a lo más alto, pero que también le hizo perder el control sobre su vida. " Hace tanto que sueño su boca, que la vida me ha vuelto loca ", cantaba Raúl en solitario, a la vez que Emma García intentaba seguirle el ritmo." Pero vamos a empezar que ahora me he aprendido la canción ", ordenaba la presentadora. Y de repente, empezaba a mostrar sus dotes musicales que, a más de uno, dejaron con la boca abierta. No todo iban a ser enfados de la presentadora por algún mal comentario.