La concursante se ha sincerado por completo sobre sus emociones y sentimientos dejando al descubierto episodios desconocidos de su vida.
Elena Rodríguez se ha enfrentado al puente de las emociones para abrirse en canal, y lo ha hecho de una manera muy sincera, comenzando por la culpa y revelando lo difícil que fue su infancia por su dislexia. La concursante, con lágrimas en los ojos, ha dicho: "Érase una vez una niña que tenía una familia maravillosa de cinco hermanos. Esta niña tenía dislexia, tenía falta de concentración, su mamá no la entendía y pensaba que se portaba mal, su mamá usaba la correa para intentar que esa niña hiciera las cosas bien. Es verdad que llevo mucho dolor, yo amo a mi madre más que a mí misma, pero ella no sabía que cada correazo que me daba hacía que saliera un monstruo que me atormentaba diciendo que no sería capaz de hacer nada como hasta día de hoy me sigue atormentando. Para la culpa, va por mis hijos, la culpable de meter mierda en casa fui yo por no darme cuenta antes de lo que pasaba, y no he hablado con vosotros nunca de esto, pero hay cosas que yo no tendría que haber permitido, soy muy culpable".
Lara Álvarez no ha podido contener las lágrimas y se ha emocionado con las palabras de Elena, por eso ha ido a darle un abrazo y le ha dicho: "No tenía ni idea, lo siento mucho", para seguir diciendo después: "Pisa orgullosa ese tablón, esta culpa te ha atormentado toda la vida y tenías miedo a contarlo, ¿cómo te sientes ahora?".A pesar de que Elena Rodríguez siente que ha podido herir a alguien, es su vida y ha querido expresarse tal cuál se siente: "Es verdad que todo este tiempo que he estado en la isla me he quitado un peso de encima y me he ido soltando y soltando, adquiriendo otra energía, otra forma de sentirme, es verdad que con el tiempo ya había superado mucho, pero hacía mucho que no hablaba de ello, espero que mi familia por contar esto no se enfade".
En cuanto al perdón, ha empezado diciendo: "Las cosas pasan, hay que asumirlas, yo no quiero perdonar a nadie, los que me gustaría que me perdonaran son mis hijos porque me hubiera gustado darles otro tipo de infancia, me tendría que haber tirado más al suelo a jugar, les tendría que haber dado más amor, son lo mejor que me han pasado, me tendría que haber olvidado de los gritos, de esa madre cansada que llega de trabajar", y si hay algo de lo que se arrepiente es de lo haber estado a la altura con sus hijos cuando eran unos niños, diciendo: "Siento vergüenza de mí misma por haber llenado un hueco de mi soledad estando con cualquiera, y los padres no se sustituyen, cada uno tiene que tener su lugar y tendrá que respetar y meterse la mano en los huevos. Cuando yo salga de aquí, si ellos quieren, esto se llevará al juzgado. No quiero que me perdonen, es mi culpa". Sus emociones se mezclan
Lo cierto es que ha llegado un momento de más calma en todas estas reflexiones, asegurando que a veces sus emociones se entremezclar: "Todas estas palabras están enredadas en mi cabeza, y me arrepiento de haber resuelto mi vida con más alegría. Me pesa mucho mi negatividad y me duele que me lo digan, pero he avanzado, porque no soy como antes, y no se por qué la gente lo sigue viendo, pero seguro que es porque tengo que avanzar más".
Y sobre de quién ha estado distanciada, ha descubierto que no se habla con una de sus hermanas, pero está dispuesta a que las cosas vuelvan a ser como antes: "Este va para una de mis hermanas. Hace tiempo que no hablo con ella por una discusión, por un problema, por historias sin sentido y me arrepiento mucho de haber tenido ese distanciamiento con ella, es con la única persona que estoy distancia y espero que podamos hablar, darnos un abrazo, y darle el placer a mi papá de ver a sus hijas juntas en su mesa comiendo. No siento que esté distanciada de mis hijos a día de hoy, los llevo muy dentro de mí. Me refiero a mi hermana Aurora que la quiero muchísimo. Eres mi hermanita mayor. Espero que nos podamos dar un abrazo y nos perdonemos".