"Para mí el perdón es liberarte de un pasado. No se puede vivir con odio y rencor", ha señalado muy rotunda. A continuación, ha narrado cómo vivió aquellos momentos tan duros y, sobre todo, ha compartido una anécdota que ha sorprendido al propio presentador del programa. Al parecer cuando llegó al hospital, su padre pidió a los médicos que no la salvaran tras conocer el estado de salud de su hija tras la explosión.
"Él decía que yo era una muñeca y me habían roto", ha contado: "A día de hoy no puede ver las fotos de antes porque veía fotos conmigo entera y se ponía a llorar". Sin embargo, y tal como ha remarcado ella misma, fueron unas declaraciones fruto de la situación y es su padre el que ahora se arrepiente viendo todo lo que le ha dado y, sobre todo, viendo lo que ella ahora ha conseguido.
"La clave de la felicidad es ser práctica"
Por su parte, Irene Villa ha compartido con cierto humor cómo han vivido sus hijos las secuelas del atentado. Así ha remarcado que no quiere que estos crezcan alrededor de la palabra terrorismo y, divertida, ha contado cómo le ha dicho a su hijo que no haga caso de los chistes que encuentre sobre ella en Internet. Unos chistes a los que ella no ha dado más importancia, aunque sí ha remarcado que de preocuparle es precisamente por sus tres vástagos.