La tercera entrega de 'La isla de las tentaciones 8' nos ha dado el que, sin duda, será el gran momentazo de la edición. Anita y Montoya entraron en el programa con ganas de ponerse a prueba pero asegurando que estaban muy enamorados y eran muy felices. No ha hecho falta esperar demasiado para que Anita haya puesto sus ojos en el tentador por excelencia, Manuel, quien desde el primer momento se fijó en ella y se acercó de manera clara.
Durante las primeras hogueras, Anita pudo ver cómo Montoya se había acercado a Gabriela pero lo cierto es que entre ellos no ha habido más que juegos en las fiestas y poco más. Tampoco le han hecho gracia algunos comentarios de su novio y así ha reaccionado: " Las inseguridades las lleva porque él es inseguro. Yo no le he dado ningún motivo para que lo sea. He estado respetándolo, aún así, teniendo una relación a distancia y si es un niño de tres años que no sabe diferenciar las cosas no es mi problema".
Anita en su hoguera | Foto: telecinco.es"Yo en todo momento le he dado la tranquilidad y la seguridad. Tiene inseguridades pero eso no es mi culpa. A mí me vendió muy bien la moto. A medida que ha ido pasando la relación es muy celoso e inseguro. Yo soy una tía segura de mí misma", decía molesta. Además, añadía: "Me está dando asco mi novio ahora mismo. Lo que me hace gracia es que diga que le gustan las chicas naturales. Le voy a devolver el peluche pero con pegatinas de carricoche. Yo conecté con Manuel desde el momento en el que entró. Me miró y no se separaban las miradas. No me preocupa mi relación ni una mierda. No está pensando en mí. Yo estoy pensando en él", decía.
El gran momento de Montoya
Sin embargo, si hay alguien que se ha llevado todas las miradas en esta entrega ha sido Montoya, quien ha protagonizado una hoguera repleta de dolor pero de comedia a ojos del espectador. Tras ver a Anita muy próxima con Manuel, Montoya se ponía de los nervios y decía: " Qué vergüenza, tío. No puedo Sandra, no puedo. Me quiero ir. Yo no valgo para esto. Yo no vengo a esto. Yo no sé lo que está haciendo. Le cortaría el grifo rápido, pido una hoguera de confrontación, me voy solo y a tomar por culo".
Montoya, desesperado | Foto: telecinco.esHa sido cuando ha visto a Anita dormir con Manuel en la cama donde ha dado lugar a una secuencia que ha sido histórica en el programa: "¿Qué pasa ahí, tío? Le está dando besos. Si ya está así... No quiero estar con esta chavala. Me quiero ir. Con el culo ahí al aire. Me quiero ir. ¿Y duermen juntos? No puedo ", decía histérico antes de pegar un grito tremendo, arrancarse la camisa y lanzar las sandalias. Sus compañeros trataban de retenerle pero era imposible.
"Que no puedo Sandra, que me voy, que me voy ya. Que me quiero ir, coño. Que no me gusta nadie. Que se quede con él. Que no quiero llorar, que no quiero que mi familia vea esto. Gracias por venir, un beso cariño mío ", decía abrazándose a Sandra Barneda. Envuelto en llanto y gritando daba una patada a la banqueta y terminaba así: "Que esto no es normal el primer día. Su madre qué va a pensar, que me tenían a mí del golfo. ¿Esto es lo que yo he tenido? La puta mierda del tatuaje (patada a la banqueta). Sandra, ¿tú me entiendes tía? No tengo ni lágrimas en el cuerpo. Tengo una decepción enorme". ¿Qué pasará cuando se entere de que Anita se ha besado con Manuel en la piscina?
